Empieza el buen tiempo, los días son más largos y aumentan los desplazamientos de fin de semana y los puentes; cortos, largos a la playa o a la montaña nos hacen lanzarnos a la carretera sin pensar demasiado en los detalles que conlleva un viaje más aún, si no somos nosotros los que conducimos. Pero te has preguntado alguna vez ¿qué tipo de copiloto eres? ¿Eres de los que se pasa el camino durmiendo…? ¿De los que más que dar conversación, discute? ¿De los que no se preocupa por nada más que su comodidad dentro del coche…?.
Está generalizada la idea de que la responsabilidad siempre recae sobre el conductor, reduciéndose el papel del copiloto al de mero figurante que de vez en cuando mira los carteles o pasa la botella de agua, sin olvidar la generalizada tipología del “copiloto durmiente” que sumido en un profundo sueño acompaña al conductor hasta que un brusco movimiento de cabeza le saca de su letargo. Desde Europcar España, empresa líder en soluciones de movilidad, se proponen diez sencillos consejos que ayudan a saber qué cosas debe hacer un perfecto copiloto y cómo ayuda al conductor para que todo se transforme en una experiencia agradable y segura.
Un buen copiloto:
- Se asegura de que la ruta y los tiempos estén bien planeados y está atento a los carteles y desvíos para que no haya volantazos ni brusquedad en la conducción.
- Siempre tiene un plan B por si la cosa se complica teniendo en cuenta posibles rutas alternativas.
- Conoce los mejores sitios para descansar a lo largo del recorrido.
- Propone distintos lugares para comer o visitar, haciendo del viaje un momento de disfrute más de las vacaciones
- Mantiene la paz y la concordia dentro del coche mediando en las disputas y organizando el confort del habitáculo
- Sabe qué emisora, selección de música y lista de reproducción hay que poner en cada momento, dependiendo del estado de ánimo y de los gustos de los ocupantes y tiene en cuenta no alterar al conductor.
- Reina en la guantera: sabe lo que tiene que haber dentro y se ocupa de que no falte nada
- Da conversación moderada al conductor cuando los de atrás están durmiendo: ni le enfada ni le olvida.
- Organiza juegos de distracción o temas de conversación interesantes cuando el tedio se instala en la parte de atrás.
- Es responsable de que el picoteo de abordo sea rico, guste a todos y no manche, atendiendo con prioridad siempre al conductor.
