Las API (conectores que permiten que las distintas piezas de software se comuniquen entre sí) llevan años existiendo y actualmente se han convertido en una de las claves para facilitar la transformación digital y la innovación en las empresas. No obstante, las empresas no están aprovechando todo su potencial ni las oportunidades de nuevos modelos de negocio que pueden generar las estrategias de apificación.
Esta es una de las principales conclusiones de la jornada Conecta ideas, crea negocios que han celebrado en Madrid las compañías VASS y CA Technologies. En ella, Diego Martínez Pomares, Solution Manager en el área de Innovación y Business Value de VASS, ha explicado que la digitalización de los negocios y la madurez de dicha digitalización están directamente relacionadas con el redescubrimiento de las API. Fundamentalmente, porque las aplicaciones han creado una nueva necesidad: la de ofrecer una experiencia omnicanal a los clientes.
“Los clientes cada vez demandan más personalización y la tecnología nos permite crear nuevas maneras de relacionarnos con ellos. Esto es un reto, pero también una oportunidad, ya que ahora podemos ser diferenciales aportando valor a los servicios que ofrecemos”, ha especificado.
Ahí es donde reside, precisamente, el potencial de una buena estrategia de apificación, que no sólo permitirá modernizar y renovar las arquitecturas de la organización sino que también facilitará la migración de sistemas al Cloud y la conexión con plataformas de terceros (socios). Todo ello permitirá reducir el time-to-market de la entrega de nuevos servicios.
Se trata, en definitiva, de una oportunidad que dará lugar a nuevos modelos de negocio, de gobierno y de arquitectura. Y lo que es más importante, estamos ante un proceso que parece no tener marcha atrás, por lo que, según ha advertido Martínez Pomares, “tan malo es no llegar como no llegar a tiempo”. “Si no lo haces tú, otro lo hará”, ha enfatizado.
A su juicio, “crear una API es fácil, lo difícil es explotarla para construir un modelo de negocio eficiente”. Por eso, como también señaló en esta jornada Francisco Rebollo, miembro del equipo de la Dirección de Business Intelligence y Transformación en Telefónica, es importante evolucionar hacia un catálogo de API que ofrezca servicios muy concretos o “microservicios” pero que den una respuesta óptima a una necesidad.
De este modo, las empresas son capaces de implementar soluciones de interoperabilidad ágiles y eficientes, empaquetar y monetizar las capacidades del negocio, atraer riqueza a través de plataformas de terceros e incluso ampliar su rentabilidad ofreciendo a los clientes funcionalidades de terceros a través del consumo de API.
“Las API son el sistema nervioso central de la economía de las aplicaciones y permiten construir nuevas aplicaciones y servicios más rápido que nunca para ofrecer una buena experiencia de cliente y diferenciarse de la competencia. Las soluciones de gestión de API de CA Technologies ayudan a sacar el máximo partido a esta tecnología y mitigar los riesgos haciendo posible crear y probar las API para garantizar su calidad, añadirles el imprescindible componente de seguridad y conseguir que escalen rápido para atender a la demanda de sus aplicaciones o servicios”, añade Rufino Honorato, CTO y director de preventas de CA Technologies Iberia.
Grandes oportunidades en el nuevo escenario de la economía de las apificaciones
De esta manera, tanto Martínez Pomares como Rebollo han coincidido en destacar las grandes oportunidades de negocio que abre el nuevo escenario de la economía de las apificaciones. Por ejemplo, en el sector bancario, la exposición de API puede ser monetizada para que suponga un nuevo modelo de ingreso. “También nos podemos beneficiar de los cambios normativos. Este es el caso de PSD2, que podemos aprovechar para ampliar la calidad de los servicios que damos a nuestros clientes con asesoramiento de inversiones, financiero o fiscal a partir de una posición global del cliente, incluso excustody”, aclaró el responsable de VASS.
Otros modelos de negocio pueden basarse en el conocimiento ya adquirido de los clientes, de manera que se puedan ofrecer alternativas a la empresa para ahorrar en determinados procesos o rentabilizar los menos eficientes.
Un cambio cultural: IT como asesor de negocio
Pero para todo ello, se hace imprescindible promover un cambio cultural entre las empresas del sector y sus clientes que empieza por considerar al departamento de IT como un nuevo asesor del negocio, ya que los nuevos modelos tecnológicos evolucionan más rápido. Según Martínez Pomares, se tiene que definir un nuevo paradigma de relación entre IT y negocio basado en una estrategia definida y consensuada que tenga claro por dónde empezar y, sobre todo, hacia dónde ir. Sólo de este modo, las organizaciones serán capaces de generar nuevos modelos de negocio a través de las API y llegar adonde todavía no se está.
