La juez titular del Juzgado número 2 de Madrid, María del Pilar Martínez Gago ha archivado la causa que pesaba sobre dos periodistas: Eduardo Inda y Esteban Urreiztieta por la filtración a la prensa de unas grabaciones del Pequeño Nicolás. La juez ha dictaminado que “no existe base real suficiente” para la implicación en el delito de ninguno de los investigados. Esta sentencia también se extiende a dos implicados más: el inspector José Ángel Fuentes Gago y el también inspector Eugenio Pino.
La investigación de este caso, que a su vez, deriva de otro caso principal, se basaba en la investigación del cruce de mensajes de los dos policías y los periodistas absueltos y la filtración a la prensa de unas grabaciones que inmiscuían al Pequeño Nicolás. Después de que el juez analizara el intercambio de correos –que tuvo lugar en los meses de octubre y diciembre de 2014- ebtre Fuestes Gago, Pino, Inda y Urreiztieta, no se deducen indicios de criminalidad.
Además, el juez ha solicitado a Estados Unidos una petición en la que le pide a la empresa Google que les facilitasen el contenido de las cuentas personas de Inda y Gago, algo por lo que la juez no ha recibido respuesta, por el momento. Después de llevar a cabo esta investigación, el juez ha archivado la causa, al entender que no existe una base real suficiente contra ninguno de los cuatro investigados.
Eduardo Inda recibe una de cal y otra de arena
El director de OKdiario, Eduardo Inda, ha conocido la archivación de este caso, varios días después de saber de la apertura de una nueva investigación contra él. En esta ocasión depende de la Audiencia de Madrid, que ha confirmado el procesamiento de Casimiro García Abadillo, Santiago González, Santiago Urreiztieta, junto con Eduardo Inda por calumnias contra una empresa en el caso Cuadrifolio.
Los cuatro están acusados de delitos continuados de calumnia y de injurias graves por una serie de artículos publicados en 2014 en el periódico El Mundo, sin contrastar la información, por lo que el diario está considerado como responsable civil subsidiario. Por todo esto, los cuatro periodistas depositaron una fianza de un millón de euros para hacer frente a los daños causados.
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