La leche materna constituye una alimentación completa y fundamental para la salud y el desarrollo del bebé, especialmente en los primeros meses de vida, y las españolas son conscientes de estos beneficios. De hecho, el 67% elige la lactancia materna como primera opción para alimentar a su bebé.
“Sosteniendo la Lactancia Materna Unidos” es el lema bajo el que se celebra, entre los días 1 y 7 de agosto, la Semana Mundial de la Lactancia Materna, cuyo objetivo es fomentar esta alimentación de los recién nacidos porque los beneficios a corto y largo plazo redundan tanto en el recién nacido como en su madre. Y es que la leche materna promueve el desarrollo sensorial y cognitivo del bebé y la lactancia natural contribuye además a la salud y al bienestar de la madre.
Si bien la mayoría de mujeres reconocen los múltiples beneficios de la lactancia materna, con frecuencia surgen barreras que les impiden amamantar durante el tiempo recomendado. En este sentido, el principal motivo de abandono de la lactancia en la sensación de baja producción de leche (29%) , la reincorporación al trabajo (17,6%) seguidos de la aparición de problemas con el pecho (7,2%) y el dolor al amamantar (6,5%). Para estos inconvenientes asociados a la lactancia, los medicamentos homeopáticos son una opción.
Dr. Jorge Manresa, pediatra, experto en homeopatía, profesor del CEDH y bloguero en Hablando de Homeopatía, lo explica: “cuando la lactancia no se produce o disminuye la secreción de leche, hay medicamentos homeopáticos que pueden ayudar a promover la producción de la leche sin que ésta se vea alterada”.
Con respecto a otros trastornos que son causa de abandono prematuro de la lactancia, como los problemas en el pecho y los directamente asociados al dolor, también, la homeopatía puede dar resultados. En este sentido, el Dr. Manresa señala que “los medicamentos homeopáticos pueden tener interés para la madre mientras da el pecho al recién nacido cuando se producen grietas, fisuras, irritación e inflamación en los pezones o incluso cuando se presenta mastitis sin que pueda llegar a alterarse el proceso de formación de leche o la misma lactancia.”
A parte de los trastornos asociados a la lactancia, los medicamentos homeopáticos también se utilizan cuando la madre lactante se ve expuesta a otras alteraciones físicas leves y que requieren la toma de medicamentos como, por ejemplo, los procesos catarrales, la migraña, nerviosismo o incluso hemorroides: “Todo ello con completa seguridad para la madre y el lactante puesto que los medicamentos homeopáticos pueden utilizarse solos o en combinación con otros y no se han descrito interacciones medicamentosas”, añade Manresa.
De hecho, cada vez hay más mujeres que recurren a la homeopatía durante estas etapas de su vida. Incluso hasta un 8% de las usuarias españolas que utilizan homeopatía entre los 30 y los 40 años la emplean para la preparación al parto y la recuperación postparto donde se ha demostrado muy eficaz.
