No es fácil tener humor y menos en los tiempos que corren. También es cierto que para algunas personas resulta complejo captar ciertas ‘modalidades’ de este arte. Hay quienes se inclinan por un humor sofisticado, cargado de matices e interpretaciones que pueden llevar a la reflexión y/o a la confrontación. Luego están los que prefieren el humor cercano, actual, entretenido y no por ello menos inteligente. Cuestión de gustos, ¿no?
Teniendo al alcance esta variedad son muchos los que se decantan por pasar unos minutos de risas -solos o acompañados- junto a La Vida Moderna, o mejor dicho, junto a Quequé, David Broncano e Ignatius Farray. La Cadena SER levanta los ‘vetos’ que exige la información y abre cada noche en antena, en YouTube y en Twitter una barra libre de humor irreverente, desfrenado, alocado e inclinado hacia una incoherencia que realmente no lo es tanto.
Cada día nos salen programas más terroristas. https://t.co/Bltr422k5O pic.twitter.com/vmSd1sVkMc
— La Vida Moderna (@VidaModernaOML) 19 de octubre de 2017
Lo que ves o lo que escuchas es lo que hay. Sin trampa ni cartón. Si acudes como público comprobarás que el caos es real desde el minuto cero y que la compenetración del ‘trío’ se materializa en su máxima extensión cuando se ponen delante del micrófono. El guión se ciñe a unas escasas líneas maestras y a partir de ahí la imaginación o la inspiración de sus protagonistas (o incluso de los asistentes) evoca y provoca el resto. La Vida Moderna hace ‘el agosto’ en su consumo online y vive unas ‘horas más complicadas’ si hablamos del EGM. Una relación a dos bandas donde la gente joven es el target perfecto del éxito.
Sin plazas para asistir a las grabaciones hasta 2018 y sin Premio Ondas hasta sabe dios cuándo… Broncano, Farray y Quequé se dejan ‘adular’ con notable simpatía por unos seguidores cargados de variopintos presentes en cada programa. Ardua tarea la de aquellos que tienen que poner en orden el estudio central de la Cadena SER tras el paso del ciclón de La Vida Moderna por la octava planta de Gran Vía 32.
Seguiremos Informando…
