La entidad financiera presidida por Ana Botín ha decidido abandonar a la Scuderia al no renovar su contrato de patrocinio. El logotipo de Banco Santander ya no brillará en el rojo coche del equipo italiano, Ferrari, como tampoco lo hará en los monos de carrera de Sebastian Vettel y Kimi Raikkonen. Así lo ha anunciado hoy el diario digital El Confidencial, que asegura que Ana Botín no está dispuesta a aceptar las exigencias del equipo de F-1, que le pedía un esfuerzo adicional a los 40 millones de euros que ya le cuesta cada temporada. En un total de ocho temporadas, Banco Santander se ha dejado 280 millones de euros en patrocinios relacionados con Ferrari y la Fórmula 1.
El aterrizaje de Banco Santander a Ferrari se produjo en el año 2010, animados por la llegada de Fernando Alonso al equipo. Según el mismo diario, fue la afición de Emilio Botín, amante de las carreras, lo que empujó a la entidad a firmar un contrato de partnership con Ferrari, convirtiéndose en la mayor inversión de su historia en patrocinios. Tras la decepcionante actuación de Alonso en Ferrari, éste se marchó a McLaren en 2014, tras no conseguir ninguna victoria para el equipo. Sin embargo, Banco Santander siguió patrocinando al ‘Cavallino Rampante’, por haber decidido ya en 2012 ampliar el acuerdo hasta 2017.
Ahora, según informa El Confidencial, esto ha terminado. Pero la cosa no queda ahí, según las fuentes del diario, Banco Santander abandonará la Fórmula 1 por completo. La entidad financiera, que invertía también 10 millones de euros en patrocinar grandes premios como Gran Bretaña o Brasil, también dejará de hacer esto, a pesar de obtener un gran rendimiento de esa actividad, según Juan Manuel Cendoya, Director General de Comunicación, Marketing Corporativo y Estudios del Santander. Sin embargo son ya 450 millones de euros los que el Banco invierte en marketing, contando con los patrocinios de La Liga y la Copa, entre otros. Ahora la institución piensa que la Fórmula 1 le sale demasiado cara.
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