El denominado ‘arte en los fogones’, tan en boga en los últimos tiempos, ha llegado este año a los campamentos inclusivos de verano que organiza la ONCE por diferentes puntos de toda España, con el fin de que los chavales puedan también disfrutar de forma lúdica de esta actividad.
Como todos los años, al aproximarse el periodo estival y de vacaciones escolares, la ONCE lanza una variada oferta de campamentos y cursillos de verano para todos sus estudiantes ciegos y con discapacidad visual grave, abiertos a la participación de niños con otras discapacidades asociadas a la ceguera y también niños sin discapacidad. Además de la cocina, los más de 600 chavales participantes contarán con actividades deportivas y de multiaventura, lúdicas y de ocio, de desarrollo de la autonomía personal o la adquisición de habilidades sociales, entre otras.
Pero, en esta ocasión, una de las principales propuestas es la celebración de un Concurso de Cocina durante todos los días de duración de la actividad veraniega, en cada uno de los lugares donde se celebren estos campamentos.
Los chavales participarán en grupos de entre 3 y 4 componentes, que deberán constituirse de la forma más heterogénea posible, es decir, que sus miembros tengan edades, condiciones visuales, características, habilidades, niveles de autonomía… distintos, potenciando el trabajo en equipo y la igualdad de oportunidades.
El concurso se celebrará en una de las jornadas del campamento. Cada uno de los equipos tendrá que elaborar una receta que después presentará ante un jurado seleccionador. De entre todas las propuestas, el jurado elegirá a un único equipo ganador por cada uno de los campamentos. Todos los ganadores recibirán como premio un fin de semana de convivencia en Madrid, entre el 7 y el 9 de septiembre, donde realizarán diferentes actividades de cocina dirigidas por algún prestigioso chef.