Neurocientíficos del Centro Integral de Neurociencias AC HM CINAC acaban de publicar en la revista científica especializada Neuron, una de las más relevantes en este ámbito, un artículo en el que se pone de manifiesto una nueva teoría cortical sobre el origen de la Enfermedad de Parkinson que cuestiona su origen periférico.
En concreto esta teoría está firmada por el Dr. José A. Obeso, director de HM CINAC, y por Dr. Guglielmo Foffani, investigador de HM CINAC, y en ella abogan por que la corteza cerebral no sería el destino final de una degeneración patológica, sino que estaría en el origen de la patología al empujar las neuronas dopaminérgicas de la sustancia negra hacia la degeneración, lo que explicaría el inicio focal de los problemas motores tradicionalmente asociados a la Enfermedad de Parkinson.
La Enfermedad de Parkinson es la segunda patología neurodegenerativa más común tras la Enfermedad de Alzheimer y sus características más reconocibles son la lentitud, la rigidez y el temblor. La teoría más extendida sobre su origen hace referencia a que las manifestaciones motoras de esa patología se deben a la muerte neuronal de la sustancia negra en una zona muy concreta del cerebro, que es crítica para el control del movimiento. “Esas neuronas mueren, pero no sabemos por qué. Según la teoría actualmente predominante, la muerte neuronal en la sustancia negra no es un fenómeno local, sino una etapa de un viaje patológico más complejo que progresa, literalmente, desde abajo hacia arriba”, señala el Dr. Guglielmo Foffani.
Alegoría del árbol
Ambos investigadores explican el cerebro mediante la alegoría de un árbol y la Enfermedad de Parkinson sería un viaje patológico. “Si visualizamos el cerebro como un árbol, este viaje patológico empezaría en la parte baja del tronco o en las raíces en la etapa pre-sintomática de la enfermedad; subiría a una altura intermedia donde empiezan las ramas en la etapa sintomática temprana; y propagaría hasta las hojas en las etapas más avanzadas. En la alegoría del árbol, la sustancia negra está donde empiezan las ramas, y las hojas son la corteza cerebral”, señala el Dr. Foffani.
Dicha visión lleva aparejada una paradoja, ya que la sintomatología que caracteriza la Enfermedad de Parkinson suele aparecer inicialmente de una manera muy focal, “por ejemplo con el temblor en una mano, o la lentitud de una pierna. La sustancia negra no tiene un mapa del cuerpo. ¿Entonces cómo es posible que la degeneración de una estructura sin mapa produzca una sintomatología tan precisa?”, se preguntan el Dr. Obeso y el Dr. Foffani.
En el artículo publicado en Neuron los investigadores de HM CINAC plantean que, “el mejor mapa del cuerpo en nuestro cerebro está en las áreas somatosensoriales y motoras de la corteza cerebral. Por lo tanto, la teoría que proponemos se basa en la idea de que la corteza cerebral no sea simplemente la etapa final de un viaje patológico de abajo arriba, sino la responsable inicial de ‘empujar’ de arriba abajo las más vulnerables neuronas dopaminérgicas de la sustancia negra hacia la degeneración. Esto explicaría el inicio focal de los problemas motores. En la alegoría del árbol, algo de la enfermedad de Parkinson empezaría por las hojas”, destaca el Dr. Foffani.
Teoría no excluyente
La publicación de esta teoría cortical es disruptiva en cuanto al concepto del origen de la enfermedad de Parkinson pero no implica que se deba romper con las actuales hipótesis sino que pueden coexistir e incluso contribuir al desarrollo de nuevas terapias. “Es importante remarcar que nuestra teoría cortical y la teoría predominante no son mutuamente excluyentes, en el sentido de que los mecanismos de abajo arriba y de arriba abajo pueden en principio coexistir, explicando la complejidad cada vez más reconocida de los fenotipos y las evoluciones de la Enfermedad de Parkinson. Por lo tanto nuestro esfuerzo conceptual podría contribuir a un marco más completo y equilibrado para la interpretación de datos existentes y el diseño de nuevos experimentos. Una implicación importante de nuestra teoría es que la corteza cerebral podría ofrecer una diana accesible y realista para el desarrollo de nuevas terapias que paren o por lo menos ralenticen la progresión de la Enfermedad de Parkinson”.
A partir de la publicación de esta teoría los investigadores de HM CINAC abren un periodo para desarrollar experimentos que intenten no solo apoyar la teoría, sino incluso desmontarla. “Lo que aprendamos de este proceso podría ser muy valioso e incluso conducir a nuevos desarrollos terapéuticos. La posibilidad de actuar a nivel cortical facilita el desarrollo de tratamientos menos invasivos para la Enfermedad de Parkinson”, asegura el Dr. Obeso.
HM CINAC está ubicado en el Hospital Universitario HM Puerta del Sur de Móstoles y es un centro de referencia mundial en el abordaje de la Enfermedad de Parkinson y otras patologías neurodegenerativas. Este complejo es una apuesta de HM Hospitales por mejorar el conocimiento en torno a estas enfermedades y en él se desarrolla una interacción científica colaborativa y multidisciplinar del que emanan estas investigaciones.