La renovación de RTVE no ha gustado a todos. Tras poner mil y un obstáculos al proceso de elección del nuevo presidente, el PP ha discutido cada una de las decisiones de la nueva cúpula directiva, clamando por la supuesta “purga” que está teniendo lugar en la Corporación y acusando de “manipulación” a sus nuevos responsables.
La última polémica ha llegado de la mano de uno de los programas más veteranos de la casa, Informe semanal. El espacio entrevistó a Oriol Junqueras, líder de ERC actualmente preso, con motivo de un reportaje acerca de las grietas que existen dentro del movimiento independentista catalán. Este hecho no gustó a Pablo Casado, que colgó el siguiente mensaje en su perfil de Twitter: “Resulta vergonzoso que en la televisión pública se vaya a emitir una entrevista a un preso implicado en el golpe al Estado que pretendió dar el independentismo. ¿Esta es la televisión que quieren?”.
Resulta vergonzoso que en la televisión pública se vaya a emitir una entrevista a un preso implicado en el golpe al Estado que pretendió dar el independentismo. ¿Esta es la televisión que quieren? @InformeSemanal #TVEsinGolpistashttps://t.co/nfYlMIuiKA
— Pablo Casado Blanco (@pablocasado_) 6 de octubre de 2018
Por su parte, Guillermo Díaz, diputado de Ciudadanos, también manifestó su rechazo a la intervención de Junqueras en Informe semanal indicando que este reportaje era un “especial golpistas” y señalando que se trataba de “propaganda en la RTVE que pagan los españoles a quien quiere quitarle sus derechos”.
La realidad es bastante diferente a la que ambos intentan hacer ver. En primer lugar, la pieza tiene un tono crítico con el independentismo, algo que Casado y a Díez omiten en sus declaraciones. Por otra parte, en un ejercicio periodístico habitual, Informe semanal recogió los testimonios de todas las partes del conflicto, incluyendo entrevistas a políticos de Ciudadanos, PSC o Junts per Catalunya, entre otros. Además, cabe destacar que la intervención de Junqueras en el reportaje tan solo ocupa 40 segundos, un tiempo menor que el dedicado a Miquel Iceta o Inés Arrimadas.
Las palabras de Casado y Díez no denotan una preocupación real por el estado de RTVE sino un intento de encender a sus respectivos seguidores uniendo dos temas sensibles (la Corporación y Cataluña) con el único objetivo de crispar el ambiente y generar un clima de tensión. Este hecho se puede observar con la utilización de una expresión tan grave como “golpista” para acusar a alguien que aún no ha sido juzgado ni condenado.
Informe semanal entrevistó a un responsable del 23F con el PP en el poder
Rosa Díez, exlíder de UPyD, también ha querido dar su opinión sobre este tema, cuestionándose si Informe semanal también hubiera entrevistado con los responsables del intento de golpe de Estado de 1981: “¿Se imaginan que TVE hubiera emitido una entrevista con cualquiera de los golpistas del 23F? Es un síntoma inequívoco de que el gobierno trata de relativizar la gravedad de sus actos. Tenemos un Gobierno indigno que avergüenza a cualquier español decente”.
¿Se imaginan que TVE hubiera emitido una entrevista con cualquiera de los golpistas del 23F? Es un síntoma inequívoco de que el gobierno trata de relativizar la gravedad de sus actos. Tenemos un Gobierno indigno que avergüenza a cualquier español decente. https://t.co/fEkFWJ1DU6
— Rosa Díez (@rosadiezglez) 6 de octubre de 2018
La respuesta es sí. El programa entrevistó al general Alfonso Armada (que sí tenía una condena en firme) para un reportaje con motivo del 30º aniversario del suceso. Lo más llamativo del asunto es que, en aquel momento, la Corporación estaba controlada por el PP, con Alfredo Urdaci a la cabeza de los Informativos de TVE, y nadie puso el grito en el cielo por la aparición de Armada en el espacio.
En definitiva, entrevistar a Oriol Junqueras en exclusiva es un logro de Informe semanal. Su opinión sobre todo lo que está sucediendo es muy importante, especialmente al encontrarse en prisión y no hablar diariamente en los medios de comunicación. Además, sus palabras están enmarcadas en un reportaje en el que también se da voz a sus rivales políticos y que tiene el único objetivo de realizar una fotografía lo más inclusiva posible sobre el complicado clima que vive Cataluña.
El incendiario mensaje de Pablo Casado se entiende mejor al repasar lo sucedido en RTVE durante el mandato del PP, cuando la manipulación y la censura era la tónica habitual. Pero, más allá de las valoraciones personales, es necesario recordar que entrevistar a una persona que se encuentra en la cárcel cuando existe interés informativo es una buena práctica periodística y no propaganda como el presidente del PP se ha empeñado en destacar, ya que, pese a que algunos no sepan diferenciarlo, recabar opiniones no significa apoyarlas.
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