Los cambios que se están experimentando actualmente, tanto regulatorios de la mano de MiFID, como políticos que afectan a la evolución de las compañías, así como de la gestión o en políticas corporativas derivados de acciones de fondos activistas, están marcando una nueva era en la relación con los accionistas e inversores y en la manera de plantear las Juntas de Accionistas. En este sentido, la firma LLORENTE & CUENCA ha organizado su evento de Temporada de Juntas 2018 junto con Morrow Sodali, para analizar las principales tendencias que han experimentado en 2018 las Juntas Generales de Accionistas.
Con el liderazgo del Director Senior del Área Corporativo Financiero de LLORENTE & CUENCA, Jorge López Zafra, y el Director de Morrow Sodali, Borja Miranda, durante esta jornada se ha debatido cómo los cambios regulatorios, políticos y de gestión han generado un nuevo paradigma que está provocando que los departamentos de Relación con Inversores, Comunicación y las áreas de Secretaría responsables de los aspectos de Gobierno Corporativo tengan un papel crítico dentro de las organizaciones, en primer lugar como asesores del top management y, en segundo lugar, como vínculo entre las compañías y la comunidad inversora.
Además, se ha puesto de manifiesto que la mejor perspectiva para atenuar riesgos de cara a las Juntas pasa por estructurar bien la comunicación con la comunidad financiera, y debe ser cometido del Consejo de Administración alentar políticas activas de comunicación capaces de llegar en tiempo y forma al accionariado y a la comunidad inversora.
Parece que la presión e influencia que ejercen los fondos activistas en la primera línea de las compañías está cambiando de forma radical el modo de interactuar de las cotizadas con la comunidad inversora. Así, Jorge López Zafra considera que “las compañías deben conocer y reunirse con sus accionistas, también los minoritarios, para escuchar sus inquietudes y así ser capaces de gestionarlas adecuadamente”. Por otro lado, la comprensión de los intereses de los minoritarios se está consagrando como una de las principales tareas del Consejo de Administración para prevenir y anticipar posibles riesgos activistas.
En este sentido, el Director de Investor Engagement de Morrow Sodali Londres, Kiran Vasantham, destacó la creciente importancia que está tomando el activismo accionarial, cómo ha dejado de ser un actor silenciado y las tendencias que se están siguiendo en Reino Unido. “Las empresas tienen que analizar sus negocios de manera crítica, como lo haría un activista, buscando los componentes de bajo rendimiento. Tienen que tratar de saber qué activistas podrían estar interesados o atraídos por la empresa y por qué. Y al mismo tiempo tienen que tratar de entender mejor su base de accionistas y desarrollar un buen plan de involucración”.
Los ponentes han coincidido en la importancia de que, a medida que se realicen más Juntas virtuales, las empresas y los inversores encuentren un terreno común sobre las mejores prácticas para garantizar que todos los interesados se beneficien de la tecnología, y que las reuniones virtuales repliquen los beneficios de las Juntas “en persona”.