En la Tierra a sábado, noviembre 23, 2024

TAXIS POR FAVOR

Hace unos años empezábamos los pioneros y exploradores de Internet a construir Medios en LIBERTAD. No me pasaré contando historias, porque acaban teniendo un tinte rancio, y además es de abuelo, y, hoy no me apetece recordar. Los periódicos de papel estaban heridos de muerte, hace 20 años, ya gritábamos y contábamos que estaban acabados, pero la financiación de las corruptelas, y los sonados silencios, consiguieron mantenerles a flote y con chófer y paga de resultados. Mientras, los pioneros mal vivíamos de las migajas que dejaban tiradas en el mercado para entretenernos. En pocos meses se crearon turbulencias que hicieron que ‘los grandes’ pasasen con tímidos esfuerzos a la Red. Allí se instalaron, primero con redacciones volantes, después ERES en todos los Medios. Los defendidos por sus asociaciones dormidas veían como todos los meses publicaban sus barómetros del imparable paro… Hoy los de siempre siguen ganando, más dinero que antes, con las redacciones más adocenadas… nadie les ha hecho una huelga ni quemado sus rotativas.

Hoy ‘los grandes’ dicen que es en Internet donde se tiene que influir, que es en las Redes donde está la verdad absoluta. El Pedrojota de aquellos días pedía en Moncloa que no se nos diesen más de 1.000 euros al mes, como aportación de las grandes empresas del IBEX 35 al sostenimiento del ecosistema internetero. Que por cierto, siempre fue y será de ellos. Aunque mañana será de Amazon, ¡cazurros! Y, eso sí, las prebendas llegarían sólo a los que se portasen bien. De nuevo toda una mentira rodeada de medias verdades, y movida por las vanidades aireadas de seres enredadores y conseguidores que se quedan con el todo. Sólo un mes de presupuesto de cualquiera de ‘los grandes’ mantenía nuestras redacciones durante un año… y, cuando soñamos que nos estábamos estirando, nos bajaron de la cama a patadas. Todo con tal de que sus cuentas maltrechas de beneficios inconfesables, exigentes de sangre, pasasen el examen de inversores sin vergüenza y ávidos por ceder el control y cobrar sus bonos.

Otros empeñados en controlar las libertades servidas con aplauso y contubernio de esas mismas asociaciones profesionales, que por otro lado fueron creadas al uso y calor del dinero que todo lo arropa. Los pioneros hemos tragado carros, carromatos y camiones cargados de improperios, persecuciones, trampas… y todo en la búsqueda de regenerar el mal llamado ‘sector de la información’. Pero, se trata de regular para que nunca se sepa la verdad (recordando la etapa de los sindicatos verticales de García Carrés). Acabamos sabiendo una parte escandalosamente pequeña de los unos… ¿y los otros? Siempre los unos y los otros, la eterna locura de una sociedad que no se perdona desde Altamira. Vimos como pasábamos de ser los actores de Internet a los fusilados al amanecer, habían llegado ‘los grandes’ e intentaban aterrizar sobre nuestras cabezas. Hubo que aguantar, tragar, llorar y despedir, y, llorar y rabiar, y, llorar y llorar…

Todo lo que escribiese a partir de ahora, sobre el problema de los Taxis en la España de Europa, y en la Barcelona de…, sería un ejercicio de gilipollez extrema. En breve llegarán los coches sin conductor, un día llegaron los robots a las redacciones de los Medios de Comunicación, otro se instalaron en los bancos, antes ya trabajaban en hospitales…

Un Taxis por favor. A lo mejor la lectura sosegada de hacia donde vamos, les hace entender.

Pedro aparicio Pérez

PD: En este Madriz es TAXIS.

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