A finales de 2018, en el mes de noviembre, la chocolatera palentina Trapa decidía lanzar una campaña con la que fortalecer su decisión de eliminar el uso del aceite de palma en sus productos. Esta acción de la marca española se llevó a cabo enviando a Borneo (Indonesia) una expedición para realizar una fotografía en una de las selvas amenazadas por la deforestación a causa de las plantaciones de palma aceitera.
La campaña, a través de esta fotografía, logró una gran repercusión tanto en medios de comunicación como en redes sociales, donde también se publicó el documental “¿Una fotografía irrepetible?”. La acción tenía por objetivo advertir que, de ser deforestada la selva, Trapa volvería al mismo lugar para intentar repetir la misma foto y constatar públicamente la destrucción del entorno natural.
Tras tener conocimiento, a través de fuentes locales, que dicho espacio iba a ser deforestado a inicios de 2019, la compañía inició los trámites para regresar al lugar para tomar de nuevo la instantánea. Este viaje, según indica la PYME, no se ha podido realizar por razones ajenas a la compañía.
En todo caso, para concluir el proyecto, los responsables de Trapa han decidido contratar los servicios de la firma planet.com, dedicada a la fotografía vía satélite. Esta compañía ha tomado, durante quince días, imágenes del lugar donde se tomó la fotografía denominada como ‘irrepetible’, evidenciando que todas las zonas cercanas han sido deforestadas o explotadas por las plantaciones de aceite de palma.
La campaña de Trapa fue reprobada por Autocontrol en un veredicto privado tras una reclamación de la Fundación Española del Aceite de Palma Sostenible. En el mismo, el organismo relataba que la acción de la chocolatera “presenta al aceite de palma como responsable principal y casi exclusivo de la deforestación mediante afirmaciones categóricas y sin matices”.
Desde Trapa, han señalado que “el lobby del aceite de palma puede intentar retirar cada campaña que hagamos, pero lo que no se puede esconder es la deforestación que provocan las plantaciones de aceite de palma, que siguen amenazando a animales en peligro extinción […] si para ocultar la realidad se ha paralizado la deforestación de una parte de esta selva amenazada, nos alegramos de poder haber contribuido a salvarla”.
Tomar partido
A principios de 2019, la agencia Grayling señalaba el Capital Cultural de las empresas como una de sus tendencias comunicativas para el futuro, es decir, las marcas se verían en la obligación de tomar partido ante un asunto de diversa índole (político, medioambiental, legislativo…) para poder conectar con el consumidor y con sus ideales.
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