De cara al 28 de abril, día de las elecciones presidenciales, diversos sindicatos, instituciones y organizaciones han hecho un llamamiento a los líderes de los partidos políticos que se disputan el puesto en La Moncloa, entre ellos se encuentra la Confederación Salud Mental España (CSME), quienes han solicitado al futuro Gobierno el desarrollo de políticas efectivas de promoción de la salud mental y de la prevención de los trastornos mentales.
Según la entidad mencionada, en nuestro país entre el 2,5% y el 3% de la población adulta presenta síntomas de un trastorno mental grave, es decir, más de 1 millón de personas afectadas. Asimismo, el 9% de los ciudadanos españoles tienen algún tipo de trastorno mental, mientras que el 15% lo tendrá a lo largo de su vida. Datos más generales, facilitados por la Organización Mundial de la Salud (OMS), advierten que para el año 2030 los problemas de salud mental será la principal causa de muerte registrada entre la población mundial.
Para cambiar las cifras expuestas, y por ende la realidad de las personas que podrían padecer esta enfermedad, y las que ya lo tienen, la Confederación Salud Mental España ha elaborado una lista de 12 acciones concretas a tomar en consideración por parte del nuevo Jefe de Gobierno, las mismas reflejan cuáles son las necesidades del colectivo, tal y como lo señala Nel González Zapico, presidente de la CSME, quien ha manifestado que dichas propuestas “deberían formar parte de la cartera política del Gobierno que se forme a partir de las próximas elecciones, ya que invertir en salud mental es preocuparse por el bienestar de las personas”.
Las 12 recomendaciones formuladas por la CSME son las siguientes:
1. Promover la salud mental, la prevención, la detección precoz y la intervención temprana aumentando la inversión económica destinada a ello.
2. Mejorar y reforzar las políticas activas de empleo para personas con problemas de salud mental.
3. Promocionar la salud mental y la detección temprana de los trastornos mentales en escuelas e institutos. A su vez, invertir en la salud mental infantil y juvenil.
4. Fortalecer el principio de igualdad entre mujeres y hombres, incorporado en la práctica profesional y en políticas tanto públicas como normativas.
5. Fortalecer la democracia por medio de medidas que faciliten la participación de las personas en todos los ámbitos.
6. Desarrollar políticas públicas enfocadas a la promoción de la autonomía y la vida independiente de las personas con trastorno mental.
7. Sistemas de apoyo, información y formación a las familias.
8. Elaborar protocolos para que las personas con problemas de salud mental puedan acceder a la justicia.
9. Impedir que las personas con problemas de salud mental vivan en prisión.
10. Desarrollar y dotar de inversión un plan de prevención del suicidio.
11. Dotar de recursos de atención a la salud mental adaptados a necesidades de las personas migrantes.
12. Invertir en estudios e investigaciones, y difundir los avances, centrándose en la prevención y promoción de la salud mental y en respuestas a la coerción.
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