Cuando no se ha cumplido el primer mes desde que Prisa haya adquirido el 25% Santillana, movimiento que le devolvió el control total de una de sus marcas más preciadas, la compañía ha recibido un revulsivo de la mano de la agencia internacional crediticia S&P, que ha elevado la nota del Grupo, pasando de “B-” a “B”, con perspectiva estable.
Prisa también ha obtenido la calificación de Moody´s, otra de las grandes agencias internacionales de rating, que ha asignado al Grupo una nota de “B2”, con perspectiva estable. La compañía, cuenta con el rating de Fitch, que es “B”, de nuevo con perspectiva estable.
Estas calificaciones son un reconocimiento a la mejora significativa de la situación financiera del Grupo, así como de la fortaleza de su negocio. Además, siguen incrementando la transparencia financiera de Prisa de cara a los mercados de capitales. {wbamp-show start}
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El pasado mes de marzo comenzaron los primeros rumores sobre las intenciones del grupo Prisa de adquirir el 25% restante de Santillana que había vendido a Victoria Capital. Este esfuerzo supuso una ampliación de capital de la compañía de 200 millones de euros, pero también supuso un golpe en la mesa de la compañía.
Para llevarlo a cabo, Prisa recurrió al respaldo de accionistas como Amber Capital, principal socio de la compañía y empresas como Telefónica que han defendido esta operación así como la de accionistas como la familia Polanco.
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