Y al undécimo mes Pedro Piqueras pudo conseguir un liderazgo global en Informativos por una décima de diferencia con respecto a su principal competidor. Un periodo en el que Antena 3 Noticias le ha comido el turrón y las torrijas y que, muy probablemente, no hubiera sido posible sin una receta muy simple.
Porque no busquen una complicada alquimia en los resultados de Telecinco, cadena de ese Grupo (Mediaset), que desdeña la información y que no duda en ‘pasar’ de unas elecciones autonómicas, europeas y municipales dejándole la cuestión a Risto Mejide y sus escribas de ‘Polònia’. No, Piqueras no se ha puesto las pilas. Se las han puesto otros. Por delante y por detrás.
La receta de Piqueras es más sencilla que el mecanismo de un chupete: echen un poco de ‘rosco’ de ‘Pasapalabra’, introduzcan unos cuantos traseros turgentes en el informativo a la hora de emitir la pieza del tiempo y, finalmente, sirvan el plato fuerte con una ración de disputas en ‘Supervivientes’. Y si son de Isabel Pantoja, mejor que mejor. Aunque unas broncas de Dakota también pueden hacer el apaño.
No, Piqueras no ha subido porque de repente Paolo Vasile se haya caído del caballo y haya decidido priorizar la información. Ni tampoco porque los bifidus catódicos hayan hecho su efecto. En realidad, todo obedece a un fenómeno de arrastre. Piqueras es ese espacio que hay entre el ‘rosco’ de ‘Pasapalabra’ y la hambruna de la de Cantora. No hay más.
A-po-ca-líp-ti-co
Escribe: Pedro Aparicio
Desde la Mudanza eterna…