Tres meses después de que se cerrase el proceso de compra más complejo que ha vivido la prensa española en los últimos tiempos, es hora de hacer balance. Prensa Ibérica fue la elegida para para adquirir el Grupo Zeta. Pudo hacerlo gracias al consentimiento de varias entidades financieras consintieran una quita del 70% de la deuda de Zeta.
Pocos días después de confirmarse esta operación, el grupo que preside Javier Moll anunció sus intenciones de crear un plan de ajustes que repercutiría directamente sobre su nueva plantilla. Después de haber trascurrido un trimestre desde que se firmase la operación, la cifra de trabajadores que han perdido su empleo ronda los 60.
A través de bajas incentivadas o con un despido directo, así es como parte de la plantilla de seis de sus cabeceras se ha visto en la calle. La más afectada ha sido la de La Opinión de Tenerife, periódico que ha desaparecido después de que Moll comprase El Día de Tenerife, competencia directa de la cabecera insular, en una operación que se ha saldado con 20 trabajadores despedidos.
El más reciente ha sido el despido de los nueve trabajadores de La Opinión de Murcia que se ha anunciado a mediados de este mes de junio. A estas salidas hay que sumar los seis despidos del Levante de Castellón, nueve despidos en La Opinión de Málaga el pasado mes de mayo y los ocho del ‘Diario de Mallorca. A estos datos hay que sumar las salidas del periódico deportivo Superdeporte de las que no se ha confirmado el número, pero que se espera, afecten a entre 5 y 7 de los trabajadores de su plantilla.
Los números de Prensa Ibérica
Si nos centramos en los datos de difusión por grupos, sólo Vocento, que cuenta con el 25,4% del total, supera actualmente a Prensa Ibérica, según los datos proporcionados por la OJD (2018). El grupo de Moll ha superado a Prisa, quien cuenta con una cuota de difusión del 11,6% pasando de tener un 11,4% a superar el 16%. Números, que se representan en más de 2,2 millones de lectores en papel al día.
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