Bertín Osborne cierra este viernes la octava temporada de Mi casa es la tuya con la visita de Shaila Dúrcal, que repasará tanto su trayectoria profesional como su vida personal. Al margen de la entrevista a la cantante, el presentador puede irse de vacaciones satisfecho, ya que su programa ha logrado recuperar parte del brillo del que gozaba antaño.
Jorge Javier Vázquez fue el encargado de abrir temporada con una entrega muy especial que giró en torno a la recuperación del ictus que había sufrido semanas atrás. La audiencia respondió a la expectación y el formato regresó con un 19,2% de share y 2.474.000 espectadores, su mejor dato desde septiembre de 2017.{wbamp-show start}
{wbamp-show end}
Una semana después, María Jiménez confirmó el buen estado de forma del programa, que cosechó un 18,5% de cuota de pantalla y 2.645.000 televidentes con su entrevista a la artista. Tras estos buenos datos, Mi casa es la tuya cayó en su tercera entrega, protagonizada por Marta Sánchez y Carlos Baute, que marcó un 12,2% de share y 1.693.000 fieles, lo que le valió para liderar su franja.
Juan José Padilla calcó los datos de la pareja de artistas y no fue hasta siete días después cuando el programa resucitó de la mano de Alejandro Sanz. La entrevista al intérprete de Corazón partío alcanzó un 16,5% de cuota y 2.048.000 seguidores, coronándose como una de las más vistas de la temporada. Tras el pequeño tropiezo que supuso la entrega de Bigote Arrocet, Mi casa es la tuya volvió por sus fueros gracias a Los Morancos, que lograron un 18,5% de share y 2.292.000 espectadores.
A falta de la emisión del último programa, la octava temporada de Mi casa es la tuya firma un 14,9% de cuota de pantalla y 1.905.000 espectadores de media, lo que supone su mejor dato de audiencia desde la cuarta temporada. La baja competencia y el acierto a la hora de reclutar a los entrevistados han sido clave para conseguir reflotar el espacio, que deberá mantener su nivel de cara al próximo curso.
Seguiremos Informando…
