“Diario de un viajer@ intrépid@”, un protocolo de humanización pediátrica del Hospital General de Villalba, perteneciente a la red sanitaria pública de la Comunidad de Madrid, fue reconocido recientemente con uno de los premios entregados por Cars for Smiles en su jornada anual dirigida a niños y adolescentes con enfermedades graves y/o crónicas para que disfruten de un día inolvidable al volante de vehículos deportivos y de alta gama.
La iniciativa parte de la base de que la hospitalización y el procedimiento quirúrgico de un niño genera un alto nivel de ansiedad, tanto en el paciente como en sus padres, que puede tener manifestaciones psicológicas y fisiológicas, y plantea el proceso como un viaje que el pequeño recorrerá con un pasaporte y visado especial de viajero intrépido, con cuya entrega y primer sello, en Admisión, comenzará una aventura que terminará en el box de despertar, donde conseguirá el último, el sello de oro.
Así, la iniciativa convierte la trayectoria quirúrgica de los pequeños en toda una aventura que sigue un “mapa quirúrgico” y en el que elementos como la decoración de sala de espera, los boxes de preparación y recuperación, los mensajes de los profesionales o el pasaporte especial, ayudarán a reducir el nivel de estrés en el proceso, tanto en los pequeños pacientes como en sus padres.
La cirugía se convertirá así en un viaje por un mundo mágico en el que la fantasía e imaginación del niño, junto con los elementos de decoración, los mensajes que encontrará en todo el recorrido y el soporte de los profesionales que reforzarán los mismos, le acompañarán en una aventura mágica, explican desde el hospital.
Un proyecto que redundará nada menos que en la disminución de la incidencia de administración de fármacos hipnóticos-sedantes durante el preoperatorio, evitando con ello sus efectos secundarios, así como de la inestabilidad hemodinámica, la administración de analgésicos postquirúrgicos y el correspondiente riesgo de delirum y agresividad.
Además, “Diario de un viajer@ intrépid@” contribuirá a que el niño colabore durante el procedimiento quirúrgico, siendo consciente en su justa medida de lo que va a ocurrir en cada momento, y a que los padres participen activamente en el mismo, reduciendo con ello el estrés y ansiedad durante el recorrido, mejorando, en definitiva, el grado de satisfacción de ambos.
Una jornada única con experiencias inolvidables
La entrega de este premio tuvo lugar en el marco de la jornada anual de Cars for Smiles que este año contó con la participación de siete pacientes pediátricos del Hospital General de Villalba diagnosticados con una enfermedad grave y/o crónica, como afectaciones neurológicas u oftalmológicas, o patologías respiratorias o digestivas, quienes, al menos durante ese día, se sintieron “especiales y afortunados“ por convertirse en copilotos de “super coches” deportivos, de esos que todos hemos deseado conducir alguna vez en la vida.
La iniciativa, única tanto para los niños y adolescentes participantes, como para sus familias, que les acompañaron desde primera hora hasta bien entrada la tarde, reunió en Madrid a más de 50 chavales y a otros tantos pilotos, en su mayoría propietarios de vehículos exclusivos de míticas marcas como Ferrari, Bentley, Porsche o Lamborghini, a los que se sumaron voluntarios y directivos de empresas patrocinadores y colaboradoras, para disfrutar de una jornada de rondas y aceleraciones de auténtico lujo.
En total, fueron más de 300 las personas que pudieron experimentar un día de lo más completo con una flota de vehículos de las que pocas veces se pueden juntar, y mucho menos disfrutar, y que comenzó con la presentación del proyecto en el Hipódromo de la Zarzuela, de donde partió la caravana de vehículos en dirección al Circuito del Jarama, donde tuvieron lugar varias rondas de rodajes y experiencias a bordo de los “super coches”, con la participación de los jóvenes como copilotos de sus “padrinos”, antes de continuar el día con un almuerzo en el mismo recinto.
El broche de oro de la jornada fue precisamente el anuncio de los proyectos ganadores de investigación o mejoras en las instalaciones hospitalarias en las que estos jóvenes son tratados para optimizar la atención a este colectivo, y a los que cada año se destina el dinero recaudado a través de las donaciones que realizan los pilotos y patrocinadores, donde “Diario de un viajer@ intrépid@” fue seleccionado entre los presentados por los centros colaboradores.
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