Los pronósticos se cumplieron y Adara se alzó este jueves como la vencedora absoluta de GH VIP 7, cerrando la edición más seguida de la historia del formato. Pese al boicot publicitario y a la polémica surgida por las novedades acerca de la supuesta violación a Carlota Prado hace dos años, Telecinco ha logrado completar una temporada histórica a nivel de audiencias, consolidando el espacio como uno de los más potentes del panorama televisivo.
Mediaset escogió GH VIP 7 como la punta de lanza de su programación para el último trimestre de 2019 y el público secundó su decisión desde el primer momento. La séptima edición del reality arrancó el pasado 11 de septiembre con un 24,6% de share y 2.529.000 espectadores, imponiéndose al otro gran estreno del tramo final del año, MasterChef Celebrity 4.
Un día después y ya sin la competencia del talent culinario, el espacio cogió fuerzas y se elevó hasta un 28,3% de cuota de pantalla y 2.725.000 televidentes. El desarrollo de las tramas llevó al espacio a ir incrementando sus datos con el paso de las semanas y, a partir del segundo mes de emisión, GH VIP logró mantenerse por encima del 30% de share en todas sus galas emitidas en Telecinco.
Uno de los puntos álgidos de la edición tuvo lugar en la sexta gala, cuando la audiencia decidió expulsar a Kiko Jiménez y el programa escogió a Pol Badía como nuevo habitante de la casa de Guadalix de la Sierra, lo que llevó al reality a cosechar un 35,6% de cuota y 3.629.000 adeptos. Pero el verdadero revulsivo del programa llegó de la mano del triángulo amoroso formado por Adara Molinero, Gianmarco Orestini y Hugo Sierra, que ha llenado minutos y minutos de la programación de Telecinco gracias a sus constantes giros de guion.
Precisamente, la expulsión del concursante italiano fue otro de los puntos de inflexión del espacio, que alcanzó un 33,6% de share y 3.492.000 seguidores con la salida de Gianmarco. Con los focos centrados en Adara, GH VIP 7 continuó su escalada y superó sin problemas los 3,5 millones de espectadores en sus siguientes galas, anotando números más propios de un partido de la selección española de fútbol que de un formato de entretenimiento.
La odisea de Adara, que en los tres últimos meses ha convertido a su archienemigo en amigo, ha perdido un novio y ha ganado otro ante los ojos de toda España, terminó con final feliz, ya que la madrileña se impuso a Alba Carrillo en una gala que firmó un 38,5% de cuota y 4.231.000 televidentes, convirtiéndose en la final con más share de la historia de la versión con personajes famosos del formato.
El tino del equipo de GH VIP a la hora de armar las tramas ha quedado reflejado en los datos del espacio. A lo largo de sus 16 galas, la séptima edición del reality a promediar un 32,3% de cuota de pantalla y 3.263.000 adeptos, situándose 16 puntos por encima de la media anotada por Telecinco en las tres primeras semanas de diciembre. De esta manera, esta temporada del formato se ha convertido en la más seguida de la historia a nivel de share, además de cosechar el mayor número de espectadores desde GH VIP 3.
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