En etapas más decadentes de nuestra historia, con las pestes y hambrunas haciendo mella en la población, los caballeros de noble linaje venidos a menos paseaban por las calles haciendo uso de mondadientes con las ropas cubiertas de migas de pan. Para esa gente que vivía más de las apariencias que de la cruda realidad, era menester aparentar haber llenado el estómago con suculentos manjares, cuando en realidad llevaban días sin probar bocado.
Algo similar ocurre con Paolo Vasile; que a falta de resultados en según qué campos, opta por hacer trucos de mal prestidigitador. Como el que ha orquestado esta semana para anunciar por todo lo alto un acuerdo con Amazon España que, más que mostrar fortaleza, lo que evidencia son sus debilidades.
Paolo Vasile no ha querido ver lo que sus vecinos sí vieron hace años: que una televisión no sólo podía ser un escaparate para emitir lo que otros producen, y que, a las series hay que buscarle rentabilidad más allá de su emisión tradicional en pantalla, lo que viene siendo exprimir el producto, que de esto sabe bastante el italiano.
Aferrado a un modelo de televisión de otra década, centrado en hacer cuota de pantallas desorbitadas, mientras el número en espectadores baja alarmantemente (hace unos años, una serie de éxito reunía a 4 millones de espectadores; ahora, en Telecinco, celebran no bajar de los 2 millones). Paolo nunca entendió que merecía la pena renunciar a una parte de la audiencia tradicional, si con eso se lograba hacer productos de más calidad, más elogiados, y de mayor proyección y venta internacional.
Así, su máximo rival le ha ido comiendo la tostada en estos años consiguiendo un prestigio internacional que se ha traducido en suculentas operaciones con cadenas, distribuidoras y operadores de todo el Mundo. Las series de Antena 3, como ‘Vis a Vis’, ‘La Casa de Papel’, ‘El tiempo entre Costuras’, ‘La Catedral del Mar’, ‘El Secreto de Puente Viejo’, ‘Velvet’, ‘Gran hotel’… se pueden ver en todo el planeta, lo que ha granjeado ingresos extra para la caja de Silvio González.
Pero en Atresmedia no sólo han sabido hacer caja así. Desde hace dos años, han hecho valer este prestigio internacional produciendo series para otros o vendiéndoles la licencia para que hagan nuevas temporadas de series ya acabadas. Esa es la misión de Atresmedia Studios, que ha producido ‘El embarcadero’ para Movistar+ o ‘La Templanza’ y ‘El internado’ para Amazon… entre otros muchos proyectos.
En esas, a Paolo Vasile no le quedaba más que resignarse y celebrar lo bien que le funciona ‘La que se avecina’ mientras ve hundirse otras de sus series de nuevo sello como ‘Señoras del Hampa’, ‘Brigada Costa del Sol’ o ‘Secretos de Estado’. Y con ese panorama, ¿qué hacemos?
Pues toca vender humo. Toca convocar a la prensa en el plató de ‘Viva la vida’ reconvertido en sala de prensa, e intentar colar como un gran acuerdo el que tres de sus series se vean antes en la plataforma de Amazon que en Telecinco. ¿Y es un logro encontrar series de Telecinco en Amazon? Pues echando un vistazo al catálogo, no lo parece… pues lleva ocurriendo meses con las series de TVE o de Antena 3.
En resumen, que a esta nueva etapa del mundillo audiovisual, globalizado y con las plataformas apareciendo por doquier, Mediaset y Paolo Vasile llegan tarde y mal. Se han pasado años con sus ‘realities’ y su telebasura y ahora han descubierto que eso no tiene más recorrido que su paso por Telecinco, que no se le puede rascar más beneficio que el clásico. Fuera de su ecosistema, ni su deteriorada marca vale mucho, ni sus productos generan interés. Y eso no hay puesta en escena que lo camufle, ni truco de magia que lo esconda. No es extraño que la última serie española que han comprado en Mediaset Italia sea ‘La Catedral del Mar’, de Antena 3.
pedro aparicio Pérez
editor y director de prnoticias.com
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