Poco más de dos semanas después de que el Gobierno le sustituyera como director de la Agencia EFE, Fernando Garea ha retomado la normalidad. Lo ha hecho volviendo al puesto que tenía como director adjunto de El Confidencial antes de que Pedro Sánchez lo nombrase en el verano de 2018 máximo responsable de la agencia de noticias EFE.
Garea ha vuelto a la que fue su casa este mes de marzo y ya ha firmado su primera información en el diario digital. Lo ha hecho con la ley de garantía de la libertad sexual como telón de fondo y con las discrepancias que existen entre los miembros del Ejecutivo. Este ha sido su primer artículo desde que firmase su última pieza en julio de 2018, varios días antes de que se anunciase su nombramiento como director de la Agencia EFE.
Su vuelta al periódico digital en el que ejerce como director adjunto coincide con su incorporación como colaborador a Hora 25. El periodista se ha convertido en el último fichaje de Pepa Bueno para la mesa de análisis del programa de La SER: “Estoy abrumado y encantado de volver a contar las cosas y a analizarlas”, ha dicho ante los micrófonos de la emisora de Prisa el propio Fernando Garea.
Con esta vuelta a la normalidad se pone fin a la polémica destitución que el periodista sufrió hace escasas semanas como director de la Agencia EFE. El Gobierno, tras varias desavenencias con el periodista, decidió destituirle del cargo ejerciendo su influencia en la dirección del medio público. La decisión provocó un gran revuelo entre los profesionales del sector y las reacciones no se hicieron esperar, dejando la imagen de la Agencia EFE especialmente dañada. Han sido muchos los que han denunciado abiertamente que desde el Gobierno se pretende imponer una línea editorial y un servilismo al gobierno de turno, que ha sido categóricamente desmentido por los trabajadores de EFE, que ahora están liderados por Gabriela Cañas. {wbamp-show start}
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