Los dos fiscales que se ocupan del caso que investiga al ex comisario Villarejo e Iberdrola han decidido cambiar la estrategia que han mantenido hasta ahora. Ignacio Stampa y Miguel Serrano han dejado atrás la vía que se centraba en las grabaciones de Villarejo y las posibles presiones de Iberdrola a Manuel Pizarro, presidente de Endesa.
Tal y como asegura el diario digital Hispanidad, los fiscales sostienen una nueva tesis que consiste en que el presidente de Endesa habría recibido presiones para que aconsejara la realización de una opa sobre la compañía que financiarían Iberdrola y Gas Natural.
De esta manera, la fiscalía habría descartado acusar a Iberdrola de pagar a Villarejo para obtener información de la competencia, sino de intentar alterar el precio de las cosas. Un delito, que desde este diario apuntan podría sumarse, presuntamente, a delitos societarios que podrían suponer penas de más de diez años de cárcel.
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