LLYC a través de su área de Talent Engagement ha elaborado unas recomendaciones para ayudar a las compañías a gestionar la comunicación y mantener la conexión y unión entre los equipos profesionales en estos momentos en que la evolución de Covid-19 están alterando el ritmo normal y los procesos de trabajo en las compañías.
Según María Obispo, Directora de Talent Engagement de LLYC “estamos viviendo un momento excepcional que está obligando a las empresas a introducir nuevos modelos de trabajo en sus procedimientos que pueden afectar a la relación con sus profesionales. De cómo gestionemos la comunicación con ellos durante la crisis depende que convirtamos este momento en una oportunidad más de mostrar cuál es nuestra cultura y forma de hacer las cosas”. Según esta experta, las recomendaciones para comunicar y mantener el engagement con los equipos son las siguientes:
Mantener una comunicación fluida. Tanto si se ha implantado sistema de teletrabajo como si no, probablemente, la compañía ha reducido el contacto directo con sus equipos. Es importante, que, pese a ello, la comunicación no decaiga. Es recomendable que los gestores se comuniquen diariamente con las personas del equipo de forma sincera y actualizando la situación de la empresa.
Activar nuevos canales. A lo mejor los canales con lo que cuenta la compañía no son los adecuados para esta situación o no lleguen a toda la plantilla. Se pueden activar otros canales tipo telegram para informar en el momento de las medidas adoptadas.
Ofrecer un mecanismo de resolución de dudas. En la situación actual surgen dudas que pueden generar más inquietud y estrés. La empresa debe valorar si es necesario habilitar algún mecanismo adicional para dar respuesta a los profesionales que tengan dudas.
Apostar por la creatividad. Uno de los mayores riesgos del trabajo en remoto en el medio/largo plazo es perder los momentos compartidos que incrementan los vínculos entre profesionales de la organización. Utilizar la creatividad para generar excusas que puedan llevar a los empleados a compartir “algo más”. Puede ser una formación extraordinaria, una sesión colectiva de buenas prácticas, un café virtual. Se trata de mantener el contacto con momentos de “disfrute”.
Crear una red de embajadores. Es importante mostrar normalidad porque ayuda a reforzar la tranquilidad del equipo. Designar embajadores dentro de la organización que compartan de forma pública (en redes sociales, grupos…) y privada (entre sus compañeros) cómo es su día a día trabajando en estas nuevas circunstancias.
Apoyar a los mandos intermedios. En estos momentos, los mandos intermedios suelen estar muy presionados. No siempre tienen información de primera mano y a la vez son el principal contacto personal con la compañía de muchas personas. Crear un manual para ellos, darles consejos sobre cómo gestionar el equipo en estos momentos y herramientas útiles de comunicación.
Reconocimiento. Poner en valor el trabajo de los más afectados. Hay áreas que están realizando un especial esfuerzo para que la compañía se adapte a las nuevas circunstancias como IT o RRHH. Aprovechar para reconocer su trabajo ante el resto de empleados. Además, la empresa debe mostrarse flexible y cercana con aquellos profesionales que están sufriendo especialmente esta situación, ofreciendo soluciones o medidas versátiles para facilitar que desarrollen lo mejor posible sus funciones.
Información. Hoy en día, la tecnología nos permite obtener información de nuestros profesionales casi en tiempo real. Apoyarse en herramientas como encuestas para preguntar a los profesionales que están en casa, cómo están y qué echan en falta. Contar con ellos, les hará sentirse escuchados y, además, dará ideas sobre qué mensajes y/o acciones es necesario reforzar.
Seguiremos Informando…