La crisis sanitaria que está provocando el coronavirus ha obligado a cerrar colegios, guarderías, institutos, universidades y demás centros de estudio, lo cual se ha convertido en un quebradero de cabeza para muchos padres. Ante esta medida, que posteriormente se completó con la obligación del confinamiento en casa, se esperaba que las cadenas de televisión en abierto dedicadas a contenidos infantiles (Clan, Boing, Disney Channel) experimentasen un repunte en sus audiencias, algo que finalmente no ha ocurrido.
Clan, líder dentro de las temáticas infantiles, es la que más ha sufrido con las medidas adoptadas por el Gobierno. Desde que el ejecutivo liderado por Pedro Sánchez puso en marcha el pasado sábado 14 el estado de alarma, su cuota de pantalla ha caído casi un 19%: mientras que en el canal promedió un 1,7% de share en los 13 primeros días de marzo, la activación del Real Decreto 463/2020 ha llevado a la cadena a situarse en un 1,4% de media durante los diez días posteriores.
Pero aún queda margen para la esperanza, ya que Aprendemos en casa, la iniciativa del Ministerio de Educación para facilitar la educación desde la televisión pública durante el tiempo que duren las medidas de aislamiento para contener el coronavirus, ha resultado ser un acierto. En su primera emisión, que tuvo lugar este lunes, el espacio se convirtió en lo más visto de la cadena, llegando a rozar el 9% de cuota y elevando la media diaria del canal hasta un 1,7% de share, un dato que Clan no alcanzaba desde que se implantó el estado de alarma. Además de despuntar en audiencias, esta apuesta de TVE ha sido alabada por lo rápido que ha sabido adaptarse a las circunstancias la Corporación, que ha conformado un formato de servicio público, didáctico y de calidad para sobrellevar esta crisis.
El confinamiento de los niños tampoco ha repercutido positivamente en Boing. La cadena de Mediaset también ha visto disminuir sus datos de audiencia, que han caído por debajo del 1% de share, una barrera que solía sobrepasar con cierta facilidad. Por su parte, Disney Channel es la que menos ha acusado las medidas del Gobierno dado que su audiencia es notablemente menor que la de sus dos rivales, lo que le ha llevado a perder tan solo una décima en este período de tiempo. La caída es mayor (-0,2 puntos) en el caso de la media mensual, ya que el canal ha pasado de promediar un 0,9% de cuota a quedarse en un 0,7% en cuestión de un año.{wbamp-show start}
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Pero, ¿por qué las cadenas infantiles no se benefician de que el consumo televisivo esté en máximos históricos y de que los jóvenes están encerrados en sus casas? Hay varias razones que podrían explicar este fenómeno: por una parte, la sociedad vive en un momento de pleno interés informativo, lo que suele repercutir negativamente en las audiencias de las cadenas temáticas al no cubrir este tipo de eventos.. Además, cabe recordar que los niños siguen con la actividad escolar a través de Internet, lo que no les permite disfrutar de la televisión todo lo que ellos querrían. Por último, las plataformas y los contenidos a la carta multiplican la capacidad de entretenimiento de los pequeños, que ya no necesitan enchufarse al televisor para disfrutar de sus series preferidas.
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