La Sociedad Española de Medicina Intensiva, Crítica y Unidades Coronarias (SEMICYUC) ha publicado una serie de medidas y recomendaciones para los servicios de Medicina Intensiva. Estos consejos se basan en la experiencia de más de dos meses de trabajo que han efectuado estos servicios, haciendo frente a la pandemia en primera línea de batalla.
Según SEMICYUC, existen evidencias para llevar a cabo en plan de desescalada. Sin embargo, creen que debe plantearse teniendo en cuenta la situación particular de cada Comunidad Autónoma. Además, desde la sociedad médica insisten en que no se puede bajar la guardia en lo que a medidas de control y seguimiento de nuevos casos se refiere, teniendo en cuenta también un previsible aumento de la patología no COVID-19.{wbamp-show start}
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De esta forma, la SEMICYUC entiende cree que la previsión de una segunda oleada del COVID-19 no debe acompañarse por una pérdida de profesionales en las UCI. Las unidades que han visto reforzado su número de intensivistas, enfermeros y otros profesionales deben mantener su número actual, más allá incluso de que se vuelva a un escenario de carga asistencial pre-COVID-19.
De cara a la segunda oleada, creen que es recomendable poder contar con un stock de, al menos, el 200% de lo necesario habitualmente. Además, aconsejan habilitar un sistema de reposición continuo que se ponga en funcionamiento según comiencen a llegar los nuevos infectados, sin esperar a que se desborden las UCI.
La respuesta debe ser más rápida que la que se ha dado en la primera oleada, con sistemas de monitorización que anticipen los escenarios a corto y medio plazo e indicadores dinámicos. Estos deben acompañarse de nuevos sistemas de información clínica que permitan medir el trabajo asistencial y obtener datos precisos que muestren cambios y posibles alarmas en tiempo real, así como una respuesta global del sistema sanitario y una redistribución de los recursos.
Por otra parte, sugieren que la desescalada debe acompañarse de una revisión de las medidas de prevención con respecto a los familiares de los pacientes. Además, aconsejan mantener el uso de dispositivos electrónicos que permitan la comunicación con las familias, asegurado el contacto telefónico.
Otra de las recomendaciones de la sociedad médica es el mantenimiento del trabajo en equipos multidisciplinares. Aseguran que la vuelta a la normalidad, siempre que se pueda, no debe ir en menoscabo de esos equipos multidisciplinares.
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