Tras ochos años dedicando sus noches del sábado a comandar una de las tertulias políticas más intensas del panorama televisivo, Iñaki López cambia de registro para ponerse al frente de Pongamos que hablo de Sabina. El documental, que consta de tres episodios de media hora cada uno, desembarcará en Atresplayer Premium este domingo 24 para analizar los amores, las pasiones, las canciones y los pecados del artista a través de una serie de entrevistas trufadas de material audiovisual inédito.
Aunque en los albores del proyecto se barajaron los nombres de cantantes como Julio Iglesias o Alejandro Sanz para protagonizar este documental, López confirma que “enseguida llegamos a la conclusión de que el primero tenía que ser Joaquín Sabina por su trayectoria, por su historia, porque es uno de grandes poetas vivos de este país y porque siempre se ha significado políticamente. Nos parecía que tenía la biografía más interesante”.
Uno de los grandes alicientes de Pongamos que hablo de Sabina es la cantidad de testimonios que alberga. A lo largo de sus episodios, personalidades tan dispares como Fernando Sánchez Dragó, Esperanza Aguirre, Pablo Iglesias, Celia Villalobos, Baltasar Garzón, Ramoncín o Leiva ofrecen sus impresiones sobre la vida del andaluz. Sin embargo, la entrevista que más ha disfrutado Iñaki no tiene que ver con ningún personaje mediático: “Lo mejor del reportaje es haber podido contar con Cristina Zubillaga, la mujer que tantas canciones le ha inspirado, entre ellas, 19 días y 500 noches. Nunca había aparecido en televisión, con él compartió muchos años de relación tormentosa y turbulenta. Habla de la vida artística, de la vida personal, de cómo es él, de la relación que mantienen, de cómo inspiró esas canciones… Me parece una aportación maravillosa, entiendes mucho mejor a Joaquín Sabina después de haber hablado con ella”.
Eso sí, el que no aparecerá por el documental será el propio Sabina, cuya ausencia tiene como motivo uno de los proyectos que tiene entre manos: “Es el único testimonio que se nos ha resistido, ahora está inmerso en la elaboración de un biopic sobre su vida y no ha podido atendernos. Nosotros no queríamos hacer solo un homenaje ni glosar sus bondades, queríamos hacer un reportaje completo con sus luces y sus sombras. En ese sentido, nos hemos encontrado con muy buena recepción por parte de todo el mundo”.
“La forma de ser de Sabina nunca ha sido una pose”
Cuestionado sobre si Pongamos que hablo de Sabina desmonta la imagen de juerguista, callejero y vividor que siempre ha rodeado al cantante, López concluye que más bien confirma la creencia popular: “Hemos descubierto que toda esa imagen preconcebida de Sabina que tenemos existe y es cierta. Cosas como que la casa de Sabina era un lugar del que medio Madrid tenía llaves es así, nos lo ha confirmado la propia Zubillaga contándonos jugosísimas anécdotas. La forma de ser de Sabina nunca ha sido una pose, él es así, se ha comido la vida a bocados y por eso es tan interesante. Es un hombre que se parece mucho a sus canciones”.
Con respecto a la posibilidad de continuar con este proyecto abordando la vida de otros artistas, Iñaki desvela a qué cantante le gustaría dedicar un documental: “Cuando hablamos de hacer un documental, manejamos varios nombres y uno de ellos era el de Julio Iglesias. Me parece que tiene un reportajazo maravilloso y ya si tuviéramos la oportunidad de entrevistarle… Pero bueno, ya se verá, este documental ha sido concebido como una única pieza y no contemplamos, de momento, hacer nada más. Si en el futuro hay opción, igual nos gustaría seguir haciendo cosas como esta y no solo con gente del mundo de la cultura”.
Con Pongamos que hablo de Sabina, el vasco cambia de registro tras casi una década dedicado a la información política, una variación que, según indica, le apetecía mucho. ¿Podría suponer este documental el inicio de una nueva etapa en la vida profesional del comunicador? “Soy mucho de probar géneros, no soy una persona a la que le guste estarse quieta. Aunque he acabado haciendo información política, yo empecé en entretenimiento pero como siempre he atrevido con todos los toros que me han puesto por delante…”, responde.
Por último, Iñaki confirma que “la televisión española tiene una deuda con la música en directo” y apunta a TVE: “Las cadenas tienen miedo a que la audiencia no responda a las actuaciones en directo pero, sin embargo, luego hay canales que apuestan por programas de karaoke como OT. Una de las obligaciones de la televisión pública es tener música en directo y no me refiero a que estemos viendo a los mismo músicos de siempre, sino a que apueste por nuevos géneros y gente nueva y que lo ponga en un horario en el que la gente lo pueda ver. TVE tiene un segundo canal maravilloso y ahí podría apostar por la música pero no para ver a los de siempre, que a esos ya les tenemos muy vistos. Que aprendan de Radio 3, que es una radio pública que tiene unos formatos maravillosos, en televisión podría hacerse algo parecido”.
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