Los bandos están claros: el programa de rojos y maricones de Jorge Javier Vázquez, gurú de la ‘nueva izquierda’, y los chicos de Vox que se encuentran enfrente del gtran comunicador, como diría Herrera, Carlos. Cada uno de ellos, encantado de la vida, porque esta política counicativa retroalimenta a sus seguidores en todas las redes. La Fábrica de la Tele, factoría filosocialista de Óscar Cornejo (ex del factotum del PSC Jaume Collboni) y Adrián Madrid (hijo del presidente socialista de Castilla y León Demetrio Madrid en los años 80), está encantada de que su amigo Jorge Javier se enfrente con los voxeros. Y viceversa.
Eso sí… Mientras, Paolo Vasile y Julio Ariza, referentes morales de los medios de comunicación españoles, contemplan el panorama.
En días pasados el máximo dirigente de Vox, Santiago Abascal, mentó a la ‘bicha’ mayor: el magnate Silvio Berlusconi. Un hombre que no pasa por ser, precisamente, un socialista de estricta observancia, sino más bien todo lo contrario. Otra cosa, claro, es lo que haga su Paolo en España.
Abascal mentó a Berlusconi como propietario del Grupo Mediaset y Jorge Javier criticó a Vox por ser “fascismo puro”. Pero los dos tenían motivos para callarse. Cada uno por lo suyo.
El de Vox, que se ha hecho íntimo colega de la política italiana Giorgia Meloni, de Hermanos de Italia, “olvidó” que ésta llegó a ministra gracias a Berlusconi, que la integró como titular de la cartera de Juventud en uno de sus gabinetes.
Y el empleado de Berlusconi tenía amnesia al señalar a Vox como “fascismo” cuando su máximo patrón italiano (el de verdad, no el trasplantado en Fuencarral) fue quien abrió las puertas de sus gobiernos a políticos ‘postfascistas’.
Seguiremos informando…
