Estimado vicepresidente (da igual el número que le haya puesto Sánchez en su camiseta), me dirijo a usted con el mayor de los respetos y una cierta envidia por su capacidad de mentir, medrar, amenazar y utilizar indeseables para que esta España cañí siga estando en la picota, mientras algunos, que no es usted, ¡válgame dios! Se enriquecen…
¡Sí se puede! salí a gritar un día, usted me llamaría facha, y a todos los del barrio de Salamanca que creímos que se podía cambiar. Y se cambió. Usted ha pasado de ser el señalador al señalado. Es vomitivo ver cuántas cosas malas cuentan de usted. Y, como dice que los periodistas (yo soy fontanero) tienen que acostumbrarnos a que nos insulten, pues les mando, a usted y a los periodistas una lista para que no se les acabe el filón… Seguro que su señoría sabrá sacarle buen partido como ya lo hiciera en sus viajes a Caracas. Esa tierra donde los niños con cáncer mueren, porque el asesino sátrapa e indecente del cucuteño (esto es Colombia, por si se le pierde como la tarjeta), de Nicolás Narco Maduro les tiene sin medicamentos porque todo es de él. ¿Así se ve usted? Y, le cuento esto después de más de 15 años luchando contra el NARCO ESTADO VENEZOLANO a través de elcorreodelorinoco.com (hoy cerrado porque nos mataron a los trabajadores, seguro que fueron malandros)… Querido vicepresidente, lo lleva claro, de momento nos quedamos con la lista para que se la vaya aprendiendo:
Abanto, abrazafarolas, adufe, alcornoque, alfeñique, alondra, andurriasmo, arrastracueros, arrastracuernos, artabán, atarre, baboso, bailón, barrabás, barriobajero, bebecharcos, becerro, bellaco, belloto, berzotas, besugo, bobalicón, bocabuzón, bocachancla, bocallanta, bocaperro, boquimuelle, borbón, borrico, botarate, brasas, cabestro, cabezaalberca, cabezahueca, cabezabuque, cabezón, cachivache, cafre, cagalitros, cagalindes, cagarruta, calambuco, calamidad, caldúo, calientahielos, calzamonas, cansalmas, cantamañanas, capullo, caracaballo, caracartón, caraculo, caraflema, carajaula, carajote, carapapa, carapijo, cazurro, cebollino, cenizo, cenutrio, ceporro, cernícalo, comepollas, comerabos, charrán, chiquilicuatre, chirimbaina, chupacables, chupasangre, chupóptero, cierrabares, cipote, comebolsas, comechapas, comeflores, comestacas, cretino, cuerpoescombro, culopollo, descerebrado, desgarracalzas, dondiego, donnadie, echacantos, echenico, ejarramantas, energúmeno, esbaratabailes, escolimoso, escornacabras, estulto, fanfosquero, fantoche, fariseo, filimincias, foligoso, fulastre, ganapán, ganapio, gandúl, gañán, gaznápiro, gilipuertas, gilipollas, giraesquinas, gorrino, gorrumino, guitarro, gurriato, habahelá, huelegateras, huevón, lamecharcos, lameculos, lameplatos, lechuguino, lerdo, letrín, lloramigas, longanizas, lumbreras, maganto, majadero, malasangre, malasombra, malparido, malcagado, mameluco, mamporrero, manegueta, mangarrán, mangurrián, mastuerzo, matacandiles, meapilas, melón, mendrugo, mentecato, mequetrefe, merluzo, metemuertos, metijaco, mindundi, morlaco, morroestufa, muerdesartenes, muerdealmohadas, orate, ovejo, pagafantas, palurdo, pamplinas, panarra, panoli, papafrita, papanatas, papirote, paquete, pardillo, parguela, pasmarote, pasmasuegras, pataliebre, patán, pavitonto, pazguato, pecholata, pedorro, peinabombillas, peinaovejas, pelagallos, pelagambas, pelagatos, pelatigres, pelazarzas, pelele, pelma, percebe, perrocostra, perroflauta, peterete, petimetre, picapleitos, pichabrava, pillavispas, piltrafa, pinchaúvas, pintamonas, piojoso, pitañoso, pitofloro, plomo, pocasluces, pollopera, quitahipos, rastrapajo, rebañasandías, revientabaules, reveintabules, ríeleches, robaperas, sabandija, sacamuelas, sanguijuela, sinentraero, sinsustancia, sonajas, sonso, soplagaitas, soplaguindas, sosco, tagarote, tarado, tarugo, tiralevitas, tocapelotas, tocho, tolai, tolili. Toli, tontaco, tontucio, tordo, tragaldabas, tuercebotas, tunante, zamacuco, zambombo, zampabollos, zamugo, zángano, zarrapastroso, zascandil, zopenco, zoquete, zote, zullenco, zurcefrenillos… estos son sólo algunos de los ejemplos.
Si quiere le puedo facilitar otros cinco mil en los que verá mucha de la fauna que le rodea.
Seguiré diciendo lo que pienso, aunque me maten.
pedro aparicio pérez
Periodisto, inventor de palabras.
