Durante la pandemia de COVID-19, en las farmacias no sólo se dispararon las ventas de mascarillas o geles hidroalcohólicos, también lo hicieron los complementos vitamínicos y los productos relacionados con la salud animal. La distribuidora farmacéutica Grupo Cofares así lo ha analizado en “Tendencias Cofares”, un estudio sobre la venta de productos sanitarios a las farmacias españolas durante los primeros cinco meses del año.
Del 15 de marzo al 15 de abril, el primer mes de confinamiento estricto en España, la demanda de mascarillas, guantes y geles hidroalcohólicos creció descomunalmente. Además, todos los productos relacionados con el coronavirus aumentaron un 420,7% respecto al año 2019. Durante ese mismo periodo de tiempo, también tuvo lugar un importante crecimiento de la demanda de suplementos vitamínicos, relacionados especialmente con el autocuidado en casa y la falta de sol. En concreto, se registró un crecimiento del 34,5 % con respecto al mismo periodo de 2019.
Los productos de cuidado de mascotas aumentaron considerablemente su consumo desde el inicio del estado de alarma. Debemos tener en cuenta que las clínicas veterinarias no trabajaron al 100% durante esas semanas, lo que llevó a utilizar la farmacia como solución alternativa. Entre el 15 de marzo y el 15 de abril, los productos de veterinaria registraron un incremento del 54 % respecto al mismo periodo del año pasado.
No obstante, también es destacable la caída en las ventas de otro tipo de productos. Por ejemplo, los de ortopedia que han experimentado el mayor decrecimiento entre el 15 de marzo y el 15 de abril, con un -53,4 % respecto al año anterior. En buena parte debido a la falta de movilidad, que ha reducido la demanda de bastones, carritos o fajas. En cuanto a productos infantiles, el cierre de los colegios varió la demanda de productos antiparasitarios para el pelo con una disminución del -51,12 % con respecto al año anterior.
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