Todavía queda un trimestre para cerrar una temporada que, cuanto menos, ha sido atípica. El coronavirus lo ha cambiado todo, no solo en nuestra forma de v ida, sino también en los modelos de negocio de los medios de comunicación. En lo referente a la radio, la crisis de la Covid-19 ha marcado el arranque de una temporada deslucida y con escasas novedades.
A falta de tres meses para cerrar el año, prácticamente las cuatro principales emisoras radiofónicas de nuestro país han mantenido a sus principales estrellas. Además, este ha sido uno de los primeros veranos en los que no se ha puesto sobre la mesa ningún despido o fichaje mediático. No obstante, cada una de las radios de nuestro país, tiene claros cuáles son sus objetivos a corto plazo.
La Cadena SER ha comenzado la temporada radiofónica sin grandes cambios. Sus programas más escuchados siguen en manos de los mismos periodistas: Àngels Barceló, Pepa Bueno, Carles Francino, Javier del Pino, Manu Carreño, etc. Con ellos, la emisora de Prisa tiene como principal objetivo despedir el año manteniéndose como la emisora más escuchada y superando los cuatro millones de oyentes, algo que ha logrado mantener en toda esta temporada.
De momento, dos semanas después del inicio del curso, sigue siendo la única emisora que ha logrado entrevistar a los dos líderes políticos con mayor poder de decisión en la actualidad: Pedro Sánchez y Pablo Iglesias.
Si existe alguien que puede arrebatarle el liderazgo a la SER es COPE. Recuento tras recuento, la emisora sigue recortando distancias y ganando adeptos. Y aunque el último recuento, otorga a la Cadena SER casi un millón de oyentes de diferencia -4,1M frente a 3,2M- la renovación de Carlos Herrera puede hacer que las distancias sigan recortándose.
Carlos Alsina, el valor más preciado de Onda Cero
Un amplio despliegue por Andalucía ha sido el escenario elegido por Onda Cero para dar el pistoletazo de salida a este arranque de temporada. El objetivo de cara al último trimestre del año estará enfocado a volver a superar la barrera de los dos millones de oyentes. Para ello, confía en Carlos Alsina, su locutor más escuchado, para que sus mañanas y los fieles de Onda Cero recorten distancias con sus competidores.
Mientras tanto, RNE tendrá que encontrar la estabilidad después de poner en marcha su nuevo engranaje. Los cambios en la dirección de este verano dejan expuesta a la emisora pública que ha sido esquiva a la suerte en las últimas mediciones de audiencias. La cita será el próximo 2 de diciembre. Esa será la primera vez que tendremos acceso a los datos que confirmen quién ha sido el preferido de los oyentes para informarse durante la crisis de la Covid-19 y quién ha logrado salvar una temporada que lo ha cambiado todo.
Seguiremos Informando…
