Desde el año 2015 Antonio Serrano-Arnal lleva investigando el origen del patrimonio de Rodrigo Rato, ahora, Serrano-Arnal ha dado por concluida la instrucción del caso. El juez considera que los contratos publicitarios adjudicados por Bankia a las agencias Zenith y Publicis podrían constituir un presunto delito de corrupción entre particulares.
A través de Alberto Portuondo, considerado uno de los testaferros de Rodrigo Rato se firmó un contrato de asesoramiento con la finalidad de asesorar, “supuestos servicios de consultoría” a cambio de una comisión de dos millones de euros. El auto del juez, al que ha tenido acceso prnoticias.com revela que los supuestos servicios de consultoría también fueron prestados por Miguel Ángel Montero.
En el auto, el juez Antonio Serrano-Arnal afirma que el contrato no corresponde a una “prestación real” de consultoría, sino que era el conducto para abonar a Rodrigo Rato las comisiones fruto del contrato de publicidad con las agencias Zenith y Publicis y obtenidas por el testaferro, Portuondo. De este modo, el auto recoge que Portuondo recibió comisiones a cambio de conseguir la adjudicación del contrato de publicidad entre Bankia y las agencias publicitarias.
Asimismo, estos hechos también afectan al exdirector de Comunicación Externa de Bankia, Miguel Robledo y a Teresa Arellano, exsecretaria personal de Rodrigo Rato. Por la parte de las agencias, el juez hace referencia contra Fernando Rodríguez, Sergio Lorca y María Cándida Rodríguez, de Zenith y Fabrizio Bini, , Francisco Xabier Olazabal, Sagrario Bua y, directivos de Publicis durante el contrato publicitario.
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