“‘El Químico’ se ha dormido en los laureles”. Es uno de los juicios que han podido escucharse estos días sobre el director de ‘El País’, tras lo que algunos consideran tres “cagadas” épicas del periódico adalid de la calidad, generando polémica en redes sociales y en la propia redacción.
El primer ejemplo tuvo lugar como consecuencia de la crisis con Marruecos por la hospitalización del líder del Frente Polisario en España. Así, el diario publicó un análisis sobre la crisis vendido en redes como “la hospitalización de un hombre de 71 años en el Hospital San Pedro de Logroño, ha generado un conflicto diplomático directo entre España y Marruecos, que preocupa a toda la Unión Europea”.
Dicho así, pareciera que el “hombre de 71 años” fuera alguien intrascendente y no Brahim Gali, máximo responsable del Polisario y Sujeto con numerosas denuncias a cuestas, ante la Justicia española por las que no ha respondido durante su estancia en nuestro país. El “hombre de 71 años” es considerado poco menos que un Josu Ternera por Rabat y su entrada, de tabardillo y con identidad falsa, ha generado un conflicto diplomático del que todavía no se sabe como vamos a salir. Pero para ‘El País’ sólo era un “hombre de 71 años”.
Por si no fuera bastante, el periódico de Prisa la lio buena al publicar una columna en la que tildaba a la actriz Kate Winslet de “gorda y vieja”, presuntamente como alabanza a su último papel. El problema es que, en general, los lectores no se lo tomaron como tal. Tampoco la Brunete feminista al servicio de Podemos dejó pasar la ocasión de clavar el puñal. Ni la vitola de referente progresista e inclusivo le libró de las críticas más furibundas.
Y, por último, otro mojón en el camino: la entrevista publicitaria a la delegada del Gobierno en Madrid, Mercedes González, aupada de la irrelevancia al cargo tras la salida de José Manuel Franco. “Un despropósito”, aseguran en la redacción, donde ya ponen de relieve el hecho de que no haya pasado un mínimo control de calidad: “En el primer párrafo meten que dice, que no ha llegado al puesto para pelear y luego unos párrafos más abajo tilda de ‘monaguillos’ de Esperanza Aguirre al alcalde y a la presidenta de Madrid”. Jajajajaajajaja.
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