Por encargo de Elizabeth Arden, en 1936, Georgia O´Keeffe pintó estramonios a mayor escala de la habitual. Hoy -y hasta el 8 de agosto-, el museo Thyssen- Bornemysza presenta una retrospectiva de la artista y la marca de belleza aprovecha la ocasión para lanzar su campaña de verano recordando y honrando la amistad entre ambas mujeres. Así, obsequia dos invitaciones a todas las clientas que compren, a partir del 8 de julio, productos en sus espacios de El Corte Inglés de Madrid.
La exposición es un completo recorrido por la trayectoria de la gran artista americana, desde sus obras de la década de 1910 con las que se convirtió en una pionera de la abstracción, pasando por sus famosas flores o sus vistas de Nueva York -gracias a las que fue encumbrada como una de las principales figuras de la modernidad de su país-, hasta las pinturas de Nuevo México, fruto de su fascinación con el paisaje y la mezcla de culturas de este remoto territorio.
Cuando Elizabeth Arden, -fundadora de la homónima marca de belleza que fue una de sus principales clientas-, le solicitó la creación de un mural para la sala de ejercicios de su salón de la Quinta Avenida, buscaba inspirar a las clientas de su flamante Red Door Spa en NY siguiendo su concepto holístico de la belleza. A partir de aquel momento, se inició una gran amistad entre las dos mujeres que marcaron una época.
Así, la marca de belleza invita a un delicioso paseo que comienza en la vanguardia artística americana de principios del siglo XX, deteniéndose en el trepidante Nueva York de los años cincuenta pasando por las delicadas obras florales que inspiraron el mural del Red Door Spa en la Quinta Avenida y, concluyendo con la última parte de su trabajo: su pasión por Nuevo México y su cultura indígena.