La historia la escriben los vencedores. Eso es lo que se suele repetir, casi como un mantra, cuando la conversación gira en torno a temas historiográficos. Sin embargo, si ahondamos un poco más, comprobamos que la Historia, además de estar escrita por los que sobreviven a las batallas, está contada exclusivamente por hombres. Al menos hasta hace muy poco tiempo, cuando las mujeres han comenzado a reclamar el espacio que por derecho propio merecen.
La nueva serie documental de Movistar+ pone el foco en esta cuestión. “Nos dimos cuenta de que moviendo un poquito la cámara hacia donde estaba la chica que nunca aparece en la peli se podía contar la Historia de otra manera”, asegura Israel del Santo, director de El corazón del imperio. Su fascinación por los temas históricos le llevó a plantearse hacer una serie que hablase de las mujeres de la antigua Roma, dejando a un lado a personajes históricos tan ilustres como Julio César, Augusto o Marco Antonio.
En pleno auge de las producciones que apuestan de lleno por las voces femeninas, se justifica asegurando que, aunque a priori “puede parecer que es aprovechar el momento, es una buena forma de contar el siglo I desde otra perspectiva”. Entre otros proyectos, Israel del Santo ha dirigido, junto al equipo de Globalset, Conquistadores Adventum, El Palmar de Troya y Lola, estrenada recientemente. Todas ellas de la mano de Movistar+. Ahora, con El corazón del imperio, retoma su pasión por la Historia.
Santiago Posteguillo, una voz autorizada
Para ello, ha echado mano de todo un experto en estos asuntos: Santiago Posteguillo. El afamado novelista ha participado activamente en la creación de la nueva docuserie de Movistar+, ejerciendo como guionista y guía de las partes no ficcionadas. “Movistar confío en que el tándem entre Santiago Posteguillo y nosotros (Globalset) podría funcionar. Da la casualidad que ya éramos amigos, y fue una buena idea”, señala del Santo.
La amistad que une al novelista y al director se gestó “por casualidad” a raíz de unas conferencias en las que participaron ambos. A partir de esa experiencia, comenzaron a plantearse abordar la posibilidad de trasladar a la pantalla la primera trilogía de Santiago Posteguillo. “Nos surgió el tema de sacar adelante su primera trilogía, Africanus. La estamos intentando desarrollar con una productora norteamericana”, explica el director de El corazón del imperio. Casualmente, de esa idea nació esta otra.
“Nos hemos entendido muy bien. Santiago puede que sea un escritor muy famoso, y puede que tenga un premio Planeta, pero está muy alejado de lo que puedas presuponer a alguien así. Es una persona que te deja trabajar, te deja escribir… Eso, los que trabajamos en la tele, lo agradecemos mucho”, confiesa del Santo sobre el autor de novelas históricas.
A ambos les une su interés por la Historia, algo que siempre ha demostrado del Santo a través de sus producciones, en cuyo proceso de creación pueden ocurrir dos cosas. “Una, que cuando estés por el capítulo 3 ya no tengas nada que contar, y entonces tienes un problema. Y otra, que cuando estés en el capítulo 4 veas que necesitas una segunda temporada. Este es el caso de El corazón del imperio“, asegura.
“Aitana Sánchez-Gijón es una más”
Para esta serie documental ha contado con un elenco de actrices entre las que destaca Aitana Sánchez-Gijón. “Aitana dentro de esto cumple su función, que es muy importante. Nosotros somos una productora muy pequeñita, pero ella es como una más en este equipo, no es un anexo. Ella ya trabajó con nosotros en Conquistadores Adventum, igual que lo es Mario de la Rosa, que interpreta a Marco Antonio”, explica del Santo. Algunas de las mujeres que forman parte del reparto, nunca antes habían actuado. Esto puede suponer un condicionante para algunos creadores, pero para Israel del Santo forma parte de su forma de trabajar.
“Nosotros, más que buscar actores, buscamos personajes. Cuando queremos retratar a Fulvia necesitamos buscar a alguien que se parezca a Fulvia, alguien que sea Fulvia. En esta serie hay mujeres que nunca jamás han interpretado ningún papel delante de una cámara”, confiesa con orgullo el director. “Alba Luna es modelo de pasarela y nunca ha trabajado en cine. Jennifer Bucovineanu tampoco había trabajado como actriz, y Joana tampoco, pero necesitábamos a una gladiadora”, explica del Santo, que define a esta debutante como “una tía tremendamente echada para adelante”.
A la hora de dirigir, del Santo se basa en la intuición. “No creo que exista una estrategia porque ninguna persona es igual. Cada actor es distinto. Yo creo que lo esencial es confiar en ellos porque si tú no confías en ellos es casi imposible que ellos confíen en ti”, asegura. Además, expone un caso práctico. “El caso de Heliogábalo es más complejo porque Alba Luna es una modelo de pasarela que tiene que interpretar un papel muy complicado delante de Aitana Sánchez-Gijón, y encima hace de hombre. Es un súper reto. Es la que más ovarios le ha echado para ponerse delante de la cámara”, reconoce.
“En Movistar+ me siento totalmente libre”
Del Santo también hace balance de su trayectoria profesional, ligada en los últimos años a Movistar+. “Somos una productora muy pequeñita, pero los resultados nos han acompañado. No nos ha ido mal del todo. Hicimos Conquistadores Adventum, que es una serie histórica que funcionó muy bien en su día, con una mirada diferente a lo que fue el momento de la conquista de América”, asegura. Una de las cosas que más valora el director de El corazón del imperio es el proceso de creación: “Sabemos que cuando una serie se emite deja de ser nuestra, entonces nos esforzamos en pasarlo muy bien mientras la hacemos”.
En Movistar+ asegura, además, sentirse “totalmente libre”. “Me siento muy a gusto en Movistar. Llevo cuatro series con ellos y las cuatro han funcionado muy bien, el proceso ha sido maravilloso. Es una cadena que apuesta a lo grande, les motivan las cosas valientes”, elogia del Santo. Un mes después del lanzamiento de Lola, su última producción, hace balance. “Ha sido la serie más vista de no ficción de la cadena, lo cual nos hace sentir muy orgullosos lógicamente, pero creo que no es mérito nuestro, es más mérito de Lola Flores porque a la tía no hay quien la gane. Me lo ha puesto muy fácil, lo ha hecho todo ella”, confiesa.
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