Recientemente, el término “flurona” (flu, de gripe en inglés y corona, de coronavirus) ha comenzado a aparecer en los medios de comunicación. Se trata de una infección simultánea de COVID-19 y gripe que apareció por primera vez en Israel el pasado domingo. La afectada era una mujer embarazada, sin vacunar de ninguna de las dos enfermedades y con una sintomatología leve.
Ahora, la coinfección ha llegado también a Cataluña, que notifica sus primeros casos. “Son casos esporádicos, no son la norma y hasta ahora no son casos que se hayan mostrado más graves. Es una coexistencia de dos virus, no frecuente pero puede pasar cuando circulan virus de diferente tipología”, explicaba Gemma Craywinckel, directora del Servicio Catalán de Salud (CatSalut). Además, los casos de flurona se abordan exactamente igual que los contagios unívocos de COVID-19.
Es importante dejar claro que “flurona” no es una nueva variante que sucede a ómicron. Según informaba Arnon Vizhnitser, director del departamento de ginecología del Hospital de Beilinson, en el diario israelí ‘The Times of Israel’: “la enfermedad es la misma. Son virales y causan dificultad para respirar, ya que ambas atacan las vías respiratorias superiores”.
Los expertos llaman a la calma, piden que no se genere alarma social y desmontan una de las teorías que circula en redes sociales. “Flurona” no es un virus nuevo, es una coinfección en un mismo paciente, ya que no es raro que virus respiratorios infecten de forma simultánea a los pacientes. Esto no está asociado, de por sí, a mayor morbilidad ni a mayor mortalidad.
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