Ginés Méndez, director general de Berlitz, pronostica que, en un 2022 donde convivirán los métodos de enseñanza de idiomas presenciales y virtuales, la figura del profesor será clave en todos los casos
Después de que 2020 fuera el año en que los centros de enseñanza de idiomas se adaptaran a marchas forzadas al e-learning a causa de la pandemia, en 2021 se vivió un regreso progresivo hacia la enseñanza presencial. Por ejemplo, en una de las escuelas con más alumnos de Berlitz, empresa internacional dedicada a la formación de idiomas presente en 70 países, situada en Valencia, el año se cerró con una paridad entre los alumnos inscritos a cursos de idiomas virtuales y los que optaron por la enseñanza presencial.
Con el 2022 por delante, Berlitz asegura que este año se consolidarán los procesos y herramientas adecuados de los dos métodos, pero que en ambos el perfil del profesor o profesora será clave. Estas son algunas de las tendencias en aprendizaje de idiomas que marcarán este 2022:
- Volver a poner en valor la figura del profesor
Uno de los cambios que se ha producido en estos dos últimos años es el traspaso de un buen número de programas de formación a licencias de autoestudio sin presencia del profesor. Las mejoras tecnológicas han llegado a crear plataformas realmente eficaces, “pero la experiencia es tozuda y ha demostrado, una vez más, que el seguimiento y la presencialidad externa de un tutor o profesor incrementa de un modo exponencial el aprendizaje”, explica Ginés Méndez, director general de Berlitz. “Las tasas de abandono se disparan si no existe esa supervisión, de modo que es importante que estas plataformas lleven añadidas esta presencialidad para aumentar la eficacia y la medición del progreso”, añade. Esto también indica que, antes de optar por un modelo 100% virtual y automatizado, en muchos casos sea más recomendable un modelo blended (que se basa en la combinación del método virtual y el presencial) con el seguimiento de un profesor o profesora.
- El éxito será para las escuelas que ofrezcan ambos métodos
“Es cierto que la vuelta a la normalidad está haciendo que la presencialidad vuelva a ser una de las preferencias de un buen número de alumnos saturados de la enseñanza online. Sin embargo, las ventajas que proporciona el ‘e-learning’ (ahorro de tiempo en desplazamiento, gastos en movilidad, flexibilidad, etc.) en muchos casos compensan esa predilección”, afirma el director general de Berlitz. Por este motivo, en 2022 se consolidarán aquellas escuelas que puedan ofrecer ambos métodos con todas las garantías de aprendizaje.
- Sacar el máximo provecho a las nuevas herramientas
Si 2021 ha sido el año de la consolidación del e-learning, 2022 es el momento para sacar un mayor rendimiento a las nuevas herramientas surgidas de la digitalización en la enseñanza. Por ejemplo, Méndez indica que “la integración de los medios audiovisuales, de actividades interactivas específicas y la existencia de herramientas automáticas para la medición del progreso son algunos de los instrumentos que han de tener las escuelas y las plataformas de enseñanza para garantizar su eficacia”.
- Un año más, la gamificación sigue avanzando
La gamificación es una tendencia sostenida e imparable, ya que durante 2021 ha seguido creciendo y todo indica que en 2022 también será una muy buena aliada para los profesores.Ginés Méndez explica que “los juegos ayudan a amenizar la formación y permiten la adquisición de conocimientos de una manera muy intuitiva. Es muy importante en este punto que las actividades sean muy específicas y tengan un encaje en la enseñanza de idiomas”.
En definitiva, como en otros sectores, este 2022 se verá marcado todavía por la convivencia de modelos analógicos, virtuales y blended, pero lo que será común en todas las variantes es el hecho de que la presencia del profesor asegurará una mayor efectividad en el proceso de aprendizaje de idiomas. Sacando el mayor partido de las nuevas herramientas y tendencias como la gamificación, el perfil del profesor se adaptará,tras años de muchos cambios, a un nuevo entorno en el que su presencia volverá a ser imprescindible.