El pasado martes, ‘El Confidencial’ estrenó nuevo diseño. Pero el público también conoció algo más: la demanda interpuesta por Iberdrola, que, en la Eléctrica, juzgan como un “éxito” en la guerra mantenida con Sánchez Galán e Iberdrola y juzgan de “regalo envenenado” la acción jurídica de Iberdrola.
No faltan quienes han recordado el mail de su director, Nacho Cardero, en el que instaba a la plantilla a implicarse, de cara al nuevo diseño, presentándolo como un “punto de inflexión en nuestro proyecto periodístico”, que de momento ha conocido una demanda por valor de 17,6 millones de euros. “Ilusionados y listos para despegar”, como arengó a los suyos.
En los ámbitos periodísticos de la capital se apunta a esta demanda como otra polémica más para el editor abulense, que ya se las tuvo que ver con las ‘stock options’ del telefónico Juan Villalonga, tan decisivas para la creación de ‘El Confidencial’, y con los efluvios de la Gürtel y el Caso Gescartera.
Al menos ahora no se le descuadrará la portada de su digital en la ‘tablet’.
