El marketing emocional o neuromarketing es una disciplina que estudia y predice los comportamientos y reacciones generadas en la audiencia ante determinados estímulos comunicacionales. En esta audiencia, busca movilizarla a través de sus sentimientos o sensaciones. Al anunciante, le aporta una herramienta para entender mejor a la audiencia y saber cómo se siente delante de un determinado impacto publicitario. Pero hasta ahora ha sido un lujo para lo grandes, y un sueño para las pymes. ¿Habrá llegado la democratización del neuromarketing?
Sobre este interesante tema, desde PRNotivias.com hemos hablado con Pablo Filomeno, CEO y cofundador de Feeder, una startup creada en Barcelona que analiza las reacciones instantáneas de la audiencia mientras ve un contenido. Experto en neuromarketing, asegura que es posible optimizar las comunicaciones basándose en conocer cómo se está sintiendo su audiencia, y así saber cómo y cuándo se le puede impactar mejor, todo ello a un precio que cualquier emprendedor puede asumir.
Según los datos que maneja, el 21% de los 615.000 mil millones de dólares que se gastaron el año pasado en campañas de marketing a nivel mundial, se desperdiciaron por falta de efectividad entre la audiencia. Por ello, su startup ha desarrollado esta aplicación. Filomeno explica que es capaz de reducir el presupuesto desperdiciado, porque rastrea las reacciones instantáneas que no se pueden fingir, ofreciendo métricas de datos de reacción en tiempo real, así como un análisis en vivo basado en emociones.
Así, hablamos con él sobre qué es el neuromarketing pero, sobre todo, para saber si ha llegado su democratización. Cómo una campaña puede generar emociones… a un bajo costo, parece que es posible. Aquí algunas de las respuestas.
-¿Qué es el marketing emocional?
-El marketing emocional es entender mejor a tu audiencia, saber cómo se sienten delante de la infinidad de impactos publicitarios que reciben a diario. Es optimizar nuestras comunicaciones basándonos en saber cómo se están sintiendo, para saber cómo y cuándo podemos impactarlos de la mejor manera posible. Esto mejora notablemente la comunicación en ambas direcciones: ayuda al anunciante a tener más y mejor información y optimización para la audiencia que recibe impactos más cualificados basados en sus emociones.
-¿Cómo puede una marca generar emociones a través del marketing?
-A través de estímulos concretos podemos despertar todo tipo de emociones. Hay que adaptar el mensaje a cada audiencia a sabiendas de cómo este puede llegar a afectar a los espectadores. De eso trata el neuromarketing, una especialidad directamente ligada con Feeder. Cuanto más a fondo conozcas a tu audiencia, más capacidad de impactar en ella emocionalmente tendrás.
-¿Es posible medir las emociones de los usuarios de redes sociales?
-Sí, claro. Es posible medir las emociones que sienten los usuarios ante los contenidos que ven en redes sociales, siempre y cuando ese análisis se haga en una plataforma para ese tipo de análisis, como lo es Feeder. La plataforma incorpora un sistema de reconocimiento facial para detectar y analizar las microexpresiones del usuario frente al contenido y traducirlo en una analítica emocional.
-¿Qué sucede si con una campaña, en vez de generar una emoción positiva, logra el efecto contrario? ¿Es posible subsanarlo más adelante?
-Por supuesto. En nuestro caso planteamos la herramienta como un espacio de experimentación con audiencias y sobre todo un lugar en el que aprender y mejorar. Por lo tanto, si en una campaña en concreto obtienes un alto grado de rechazo, por ejemplo, lo que Feeder te permite es aprender de ello y estudiar a fondo a qué tipo de gente le está generando ese rechazo y en qué punto específico del contenido. De esta manera puedes llegar a saber qué estímulos/inputs afectan de una manera u otra a cada segmento de tu target. Cuanto más aprenden nuestros clientes, mejor contenido crean y mayor ROI obtienen.
-¿Cómo se realiza el proceso de rastrear las reacciones instantáneas de los usuarios de redes sociales?
-Para ser sincero, actualmente no sabemos sobre seguro si nos están rastreando por ejemplo desde Meta o desde cualquier otra plataforma en la que entremos a diario. Todo podría ser y no, creo que a nadie le sorprendiera descubrir que sí. En nuestro caso, hemos creado una herramienta propia para que el análisis sea completamente privado, anónimo y seguro para los usuarios y en todo momento saben que se les está analizando. No solo eso sino que se les recompensa por ello. Por lo que respecta a nuestros clientes, el análisis se hace mediante un SaaS muy fácil de utilizar (con ciertas reminiscencias al primer FBAds) en el que en menos de 2 minutos puedes crear una campaña y en otros 2 minutos sacar conclusiones del reporte de resultados.
-¿Para qué sirve que los anunciantes y las agencias analicen las reacciones y emociones de los usuarios?
-Cuanto mejor conozcamos a nuestras audiencias, mejor comunicaremos y mejores resultados obtendremos. Conocer cómo reacciona nuestro target a determinados estímulos nos ayuda a entender sus procesos y sus inquietudes, ayudándonos así a optimizar las creatividades y mensajes que le mostraremos. El objetivo final es afectar directamente en el rendimiento y el retorno de la inversión de cada campaña.
-¿Puede un autónomo o pequeño emprendimiento realizar una campaña online utilizando el marketing emocional con un presupuesto bajo?
-Uno de los principales objetivos de Feeder ha sido democratizar el neuromarketing y los estudios de mercado, antes relegados a grandes cuentas y grandes presupuestos, a los que era casi utópico poder acceder para una agencia pequeña o un autónomo. Ahora, con Feeder se pueden hacer campañas de análisis emocionales basados en las reacciones instantáneas de la audiencia, a partir de 99€.
-¿Qué le recomienda a una pyme para evitar desperdiciar presupuesto en campañas de marketing online poco efectivas?
-No solo a una pyme, sino a todo el mundo, le recomendaría que incorporara analíticas cualitativas en su análisis, no conformándose sólo con la data cuantitativa a la que estamos tan acostumbrados (clics, impresiones, ctr, etc). La falta de análisis cualitativo es la causante de que desperdiciemos el 21% de los presupuestos de marketing a nivel global. No solo eso, sino que también provoca que los equipos de marketing terminan dedicando 1/3 parte de su jornada laboral interpretando datos y dándoles un sentido cualitativo. Sin embargo, incorporando análisis de carácter puramente cualitativo en base al registro emocional del target, a nuestros procesos de marketing logramos llegar a un nuevo estadio de entendimiento y comprensión de nuestras audiencias que nos lleva a una optimización de los contenidos, los recursos y los mensajes, derivando en una obvia mejora del retorno de la inversión, reduciendo ese desperdicio del presupuesto.
Seguiremos comunicando…
