El proyecto, denominado STAb, puñalada en inglés, es ‘una vuelta de tuerca’ de las terapias celulares para combatir de manera más integral los tumores hematológicos que los conocidos CAR-T. La tecnología STAb, ensayada inicialmente en leucemias, tiene el potencial de abordar otros tipos de tumores de sangre, como mieloma en lo que ya se está trabajando, o tumores sólidos, una de las últimas barreras de las terapias celulares desarrolladas recientemente. Una gran noticia ya que cada año mueren 200.000 personas de leucemia en el mundo. Según ha explicado el Dr. Luis Álvarez-Vallina, director de la Unidad CRIS, se trata de un “histórico ensayo clínico en humanos a lo largo de 2022”.
El proyecto y los avances prometidos han sido publicados en la prestigiosa Cancer Inmunology Research que constata que esta novedosa terapia STAb es un salto cualitativo en el tratamiento de la leucemia y que en los modelos experimentales utilizados muestra ser incluso superior a la CAR-T, ya que puede evitar recaídas. Estos excelentes resultados sientan las bases para poner en marcha un ensayo clínico en humanos.
Funcionamiento de “puñalada al cáncer”
La aparición de las terapias CAR-T (células del sistema inmunitario con unos receptores a modo de radar, que les dirigen contra el tumor) supuso y supone una revolución en el tratamiento de estos cánceres, pero todavía presenta algunas limitaciones .En muchas ocasiones, a pesar de una gran mejora inicial, ocurren recaídas, además, las terapias CAR-T eliminan al tumor, pero no movilizan al resto del sistema inmunitario, algo que sería muy útil para consolidar la respuesta del paciente.
“Con el proyecto STAb damos un paso más en el uso de la inmunoterapia para luchar contra el cáncer, esto demuestra la necesidad de apostar por la investigación, ahora más que nunca, y no parar” señala Marta Cardona, directora de CRIS contra el cáncer y añade que “esta colaboración en el tiempo está dando unos resultados impresionantes en la cura de la leucemia e incluso a futuro para otros tumores. Gracias a la constante y gran aportación de Andbank estamos desarrollando esta terapia que es realmente revolucionaria y muy esperanzadora”.
Según el Dr. Luis Álvarez-Vallina, que ya cuenta con un equipo de 15 investigadores a su cargo, “es la primera vez que se desarrolla en nuestro país una estrategia de inmunoterapia tan innovadora promovida por un grupo de investigación en constante colaboración con otros grupos de nuestro Hospital y de otros centros. Es un proyecto pionero a nivel internacional con un gran compromiso social”.
Beneficios para los pacientes
Tras demostrar su eficiencia en los laboratorios, el proyecto iniciará un ensayo clínico con pacientes a lo largo de 2022.Ahora bien, ¿qué beneficios exactamente se esperan tras este ensayo? Vallina explica que, “las mejoras que presenta respecto a otros tratamientos de inmunoterapia basados en células del sistema inmunitario: es más eficaz y, evita el escape tumoral y por tanto la recaída, a diferencia de las terapias CAR-T. Con las terapias CAR-T las células tumorales tienden a camuflar los elementos que las hacen reconocibles, pero las células STAb consiguen evitar este efecto”. Además, añade un importante dato: “Las células STAb no sólo atacan a los tumores, sino que producen unas moléculas con las que se arman, a modo de puñales”, lográndose así un gran efecto de reclutamiento y amplificación, al convertir a todos los linfocitos en “soldados”.
Por su parte, Belén Blanco, que forma parte del equipo de la Unidad CRIS de Inmuno-Oncología, ha resaltado la importancia de seguir avanzando en nuevas estrategias. “Las células CAR-T y otras opciones de inmunoterapia han tenido éxito en los últimos años para curar a un porcentaje de pacientes, pero queda otro alto porcentaje que no logra beneficiarse de estas terapias y por eso es tan importante seguir avanzando. Creemos que la estrategia STAb puede tener un efecto muy importante en estos pacientes en los que la terapia CAR-T no es efectiva”.
Este proyecto es considerado por los expertos como un hito, y es que con esta publicación se sientan las bases para poder aplicar este tipo de terapias a otras enfermedades, desde otros tumores de la sangre (como el mieloma múltiple, en el que ya están trabajando) hasta tumores sólidos, una de las últimas barreras de las terapias celulares contra el cáncer han presentado en los últimos años.
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