Karen Becker Cares, jueza del Tercer Juzgado de Familia de Santiago ordenó al Registro Civil inscribir a un adolescente de 17 años con género no binario, destacó el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh).
Javiera Zúñiga vocera del Movilh afirmó: “esta sentencia marca un hito, en tanto define el no binarismo, reconoce que los géneros son fluidos. Además termina con la imposición del binarismo en la identidad legal. También lleva a la praxis importantes principios de la Ley de Identidad de Género y de la Declaración universal de Derechos Humanos. Asimismo de la Convención de los Derechos del Niño y de los pronunciamientos de la Corte Interamericana de DDHH. Animamos a más personas que no se sienten identificadas ni como hombre, ni como mujeres, a exigir en tribunales y/o en el Registro Civil que se reconozca su género no binario“.
El tribunal estableció: “las identidades no binarias son aquellas que no se identifican con uno de los dos géneros reconocidos en la mayoría de culturas occidentales: la de hombre o la de mujer. La etiqueta de no binario puede encapsular una multitud de significados. Esto debido a que uno puede o identificarse como hombre y mujer, o dentro del espectro masculino-femenino. Además no puede no identificarse como ninguno”.
Teniendo en consideración los principios de interés superior del niño y de autonomía progresiva establecidos en la Ley de Identidad de Género y la Convención de los Derechos del niño. Además la Declaración Universal de Derechos Humanos, la Observación General número 12 del Comité de los Derechos del Niño. También de la Opinión Consultiva 24/17 de 24 de noviembre de 2017, de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, la jueza finalmente ordenó al Registro Civil reconocer el género no binario.
La sentencia
La sentencia la dictó dos meses después de que un adolescente solicitara al Tribunal el cambio del nombre y sexo femeninos asignados al nacer. Esto lo hizo contando para el ello con el respaldo de su padre, un abogado, y de su madre, una psicóloga.
En su demanda, el padre y la madre señalaron que su hije “en una oportunidad al ver a un personaje de una serie, de identidad de género masculino, de nombre xx sintió que ese nombre la identificaba más que su nombre actual. Dicho nombre es utilizado tanto para hombres como para mujeres. De ese modo, al pasar los años, lentamente comenzó a solicitar a todos sus cercanos y amigos que le llamaran así. Este cambio de su nombre de pila además, con los años, le permitió identificarse como una persona de género fluido. Ello sin identificarse completamente ni con el género femenino ni masculino, transitando libremente entre ambos. Además utilizando ambos pronombres para referirse a elle misme”.
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