Cristina Pedroche (Madrid, 1988) vuelve a Love Island. Lo hará este domingo 22 de mayo (21:00h) con una segunda edición del formato que promete muchas sorpresas. El programa, de adaptación internacional, regresa a Neox tras una primera temporada que gozó de gran éxito entre los jóvenes. Prueba de ello son las ganas que tiene la presentadora de Atresmedia de volver a la villa.
En esta nueva edición, nuevos concursantes solteros viajarán hasta Gran Canaria para buscar el amor. Los isleños e isleñas se enfrentarán también a juegos, sorpresas y desafíos mientras conviven aislados del mundo exterior en una espectacular villa de lujo frente al mar. Los jóvenes participantes tendrán un único requisito para no ser eliminados: estar siempre emparejados.
Segunda temporada de ‘Love Island’. ¿Cuáles son tus impresiones antes de marcharte a Gran Canaria de nuevo?
Tengo muchísimas ganas de empezar esta segunda temporada. Muchas ganas de que conozcáis a mis isleños. Este año voy con más ganas, porque como ya conozco el formato, y hay muchas novedades, ya sé lo que puede pasar, pero no sé lo que va a poder pasar con el nuevo contenido que vamos a meter. Estos isleños ya han visto el formato anterior, entonces tenemos que sorprenderles.
Tenemos que hacer cosas distintas y cambiar cosas en la mecánica para pillarles por sorpresa. No solo les vamos a sorprender a ellos, sino también a los espectadores. Tengo muchas ganas de empezar. El año pasado tenía ganas de empezar porque no sabía a lo que me enfrentaba, y este año tengo más ganas aún porque sé que me lo voy a pasar increíble. Sobre todo, con ganas de que se empiece a emitir ya para que lo podáis ver y nos enamoremos todos.
¿Has notado que los nuevos solteros vienen con la lección aprendida porque juegan con la baza de la primera edición?
Imagino que sí. Yo no les conozco aún, no he estado en persona con ellos. Entiendo que si tú entras en un formato como este del que ya ha habido una temporada anterior, te lo has visto. Ojo, que puede haber gente que no haya visto la primera temporada y venga aquí a sorprenderse. Pero bueno, la hayan visto o no, todo va a cambiar. Hay muchas sorpresas y muchas cosas distintas.
Como parte esencial del programa que eres, ¿te dejan aportar ideas desde dirección de cara a mejorar el programa o añadir cosas nuevas?
El formato ya existe, lo hemos traído a España y al final soy una parte importante del programa. Yo soy quien entra y les dice lo que va a pasar y lo que no. Yo propongo todo el rato porque ya sabéis como soy, proponiendo cosas y tratando de sorprender al espectador. Pero luego el formato es lo que es, las pruebas ya están pensadas y previstas aunque los concursantes no las sepan.
En el fondo, este programa tiene un “trabajazo” brutal. Lo que se graba el domingo, se emite el lunes. Creo que es una de las claves del éxito de Love Island .Va muy con la inmediatez. Entonces, no se puede filtrar ni saber nada porque está pasando casi al momento.
De hecho, los espectadores son mucho más importantes que yo. Yo doy las directrices y luego puedo aportar una gracia o no, pero los espectadores son los que toman las decisiones. Eso sí, como presentadora te digo que alguna vez he votado. También tengo la aplicación y alguna vez he votado. No voy a decí para qué ni para nada… Yo también lo vivo porque también soy consumidora del programa.
También me preguntan mucho por qué no estoy más presente. Cada vez que yo voy a la villa ellos se ponen en “modo tele” y cambian. Se dan cuenta de que hay cámaras. Entonces, es mejor dejarles unos días sin que sepan cuando voy a entrar o cuando no, porque se olvidan tontamente de las cámaras y es cuando realmente son ellos. Mi presencia está medida perfectamente. Eso sí, yo en mi casa lo veo todas las noches. No me lo pierdo.
¿Cómo haces para tener una relación de distancia con los concursantes y no hacerte colega de ellos?
Me cuesta muchísimo, muchísimo. Cuando voy a abrir la puerta de la casa digo no hables si no se va a grabar. No quiero hablar porque si hablo, me hago amiga. Y yo que soy transparente se me notan las cosas. El año pasado eran perfiles increíbles, gente súper maja, súper normal… Es que podrían ser mis amigos perfectamente. De hecho, muchos nos seguimos en redes y nos vemos. Son gente muy guay, entonces me cuesta no llorar, no emocionarme o no reírme.
Ahora que vas a volver a la isla, ¿qué cosas crees que no hiciste bien en la edición anterior y has puesto tu cabeza en que esta vez te salga mejor?
Pues, a lo mejor suena mal, pero yo creo que lo hice muy bien (risas). Me lo pasé increíble, entonces creo que lo hice bien y me aportó muchas cosas. Yo me vi muy bien, entonces este año voy con más ganas porque creo que lo voy a hacer mejor.
Cuando hemos hablado con Sandra Barneda, de ‘La isla de las tentaciones’, nos ha comentado que en los desayunos siempre comentan lo que ha pasado la noche anterior. ¿Vosotros también sois así detrás de las cámaras?
Claro, lo que veis es lo que se graba. Ahí es cuando estoy con ellos, pero yo cuando salgo de la casa me voy a realización y miro todo. Tengo que saber todo y me gusta saber exactamente todo al instante porque de repente todo cambia. Así es Love Island. Todo cambia en un segundo. Tengo que tener todos los recursos posibles y las salidas posibles para enriquecer más todas mis preguntas y mis interacciones con ellos. Me empapo del formato a tope.
Habéis comentado que algunas parejas que salieron de la primera edición siguen juntas. ¿Crees que existe el amor para toda la vida?
¿El amor existe para toda la vida? Sí, o no, y no pasa nada. Lo importante es el amor propio. Luego el amor de pareja, pues está muy bien, y puede ser para toda la vida o no. Tampoco es algo que marque la felicidad de una persona. La felicidad hay que buscarla en uno mismo y luego darle un barniz más bonito con personas que nos puedan aportar cosas.
En Love Island, que las parejas sigan quiere decir que el formato funciona. A parte de ser un concurso, el objetivo final es llegar con pareja. Y si de repente, te enamoras y un año después siguen juntos, es muy guay. Yo creo en el amor a primera vista y en el amor para siempre.
Si estuvieras soltera, ¿te gustaría buscar el amor en ‘Love Island’?
Si yo tuviera 20 años claro que hubiera ido a Love Island. Me parece un planazo… Es que son como unas vacaciones en la tele. Me parece un formato increíble, súper blanquito. Aquí no vamos a dejar mal a nadie, ni a hacer daño… Son jóvenes que se lo quieren pasar bien y buscar el amor. Si lo encuentran, perfecto, y si no, se lo están pasando bien y ya está. Es un formato que me encanta.
Una de las críticas que más se hacen a este tipo de formatos es la selección de los concursantes porque son todos muy normativos. ¿Cómo llevas tú ese tipo de críticas?
No leo mucho las críticas. Me gustan las que son constructivas. Si es algo que me está diciendo cómo ser mejor, sí. Y si viene de alguien con un poco de validez. Esto de criticar por criticar de la típica persona que tiene un huevo de avatar… Pues lo mismo me importa su opinión, la verdad, con todo el respeto. A nadie le decimos cómo se tiene que vestir, ni si se tiene que maquillar, poner un tacón, ni la longitud del bañador… Darles mayor importancia a unas críticas sin fundamento me parece una tontería.
¿Qué haces en los ratos libres? ¿Te bañas en la playa, te llevas un libro, ves series de televisión…?
Cuando voy para allá, sobre todo voy estudiando guión y leyendo los resúmenes de cada día. Me voy estudiando todo eso para estar informada. Pero esto es una cuestión mía de formación profesional, porque quiero tener todas las salidas posibles, y luego porque soy muy cotilla y me encanta saberlo todo. Creo que esto me hace mejor presentadora.
Y luego, en mis ratos libres, cuando vuelvo de Canarias, me voy con mis libros y tal… Estoy bastante metida en el mundo de la lectura para desconectar de toda la vorágine y de todo el estrés. Para desconectar del móvil, leo bastante.
Seguiremos Informando…