La Comunidad de Madrid ha autorizado la contratación de cerca de 350 profesionales sanitarios de refuerzo en los hospitales públicos para hacer frente al incremento de casos por el Virus Respiratorio Sincitial (VRS), el principal causante de bronquiolitis en la población infantil.
Una decisión tomada tras la alerta de la Sociedad Española de Urgencias Pediátricas (SEUP) sobre aumento de asistencias en las urgencias infantiles de todo el territorio, hasta un 40% más que en 2019, debido principalmente al incremento de casos de bronquiolitis asociada al virus respiratorio sincitial (VRS).
En concreto, la confluencia de la bronquiolitis por VRS, con la gripe y la covid ha disparado las consultas en menores de 4 años y es que el aumento de los tres virus se produce sobre todo en la franja de edad de 0 a 4. Los primeros casos se empezaron a atender en julio, cuando en época prepandemia este virus aparecía en octubre, pero la principal inquietud de estos profesionales es que se desconoce cuándo se alcanzará el pico máximo y si la gravedad de la enfermedad será mayor que otras temporadas.
La bronquiolitis es una infección de las vías aéreas más pequeñas en los pulmones. Puede aparecer en cualquier época del año, aunque es más frecuente en los meses de invierno y al comienzo de la primavera (desde noviembre hasta marzo y abril). Los lactantes menores de tres meses son los que tienen más riesgo de hospitalización y, de entre ellos, los prematuros.
En el caso concreto de la capital, esta medida, está enmarcada en el Plan de Invierno implementado por el Servicio Madrileño de Salud en el Área de Pediatría, y supone la incorporación de 27 pediatras, 167 profesionales de enfermería, 139 auxiliares de enfermería y nueve celadores, lo que suma un total de 342 efectivos adicionales.
La Dirección General de Salud Pública de la Consejería de Sanidad cuenta con un Sistema de Vigilancia Centinela de la infección respiratoria aguda causada por los virus de la gripe, COVID-19 y VRS con la finalidad de detectar y monitorizar la incidencia y características epidemiológicas y microbiológicas de los patógenos circulantes y, con ello, poder poner en marcha la respuesta más apropiada lo antes posible.
Esta adaptación de la vigilancia de virus respiratorios emergentes fue implementada a finales de 2020 en la Comunidad de Madrid, motivada por la pandemia de coronavirus, y se lleva a cabo tanto en Atención Primaria como Hospitalaria.
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