Tras un año marcado por la incertidumbre macroeconómica, las subidas de tipos y la crisis energética derivada de la guerra de Ucrania, en el que el Ibex 35 perdió un 5,56%, la Bolsa española parece comenzar 2023 con optimismo. Arranca así el nuevo año con subidas del 0,8% que le acercan a la cota de los 8.300 puntos, en una sesión en la que las Bolsas de Tokio, Londres o Nueva York, no operan por la festividad del Año Nuevo. Así, la jornada se prevé tranquila y los inversores estarán únicamente atentos a los índices PMI finales de diciembre como referencia para guiar sus movimientos.
Dentro del selectivo español, IAG y Acerinox son los valores que más suben, casi el 2% y el 1,5%, respectivamente. Ninguna cotizada registra a esta hora pérdidas. Y, hay que recordar que durante 2022, CaixaBank, Banco Sabadell y Repsol fueron los valores más alcistas, al subir el 52,11%, el 48,85% y el 42,24%, respectivamente. Datos que coinciden con el hecho de que el sector bancario sea uno de los más repetidos en las perspectivas de cara a 2023.
Ahora bien, en un plano más amplio, los analistas señalan ciertas tendencias y riesgos que podrían afectar a los mercados en 2023. Así, creen que el endurecimiento de las políticas monetarias se dejarán notar tanto en la actividad económica como en los resultados empresariales. Además, no se debe perder de vista factores como: la guerra de Ucrania, la elevada inflación o los rebotes por Covid-19 en China.
Por último, de cara a la primera semana de 2023, los inversores esperan una fuerte batería de datos macroeconómicos, incluyendo los PMI manufactureros, el IPC de las principales economías del mundo, las actas de la última reunión de la Reserva Federal y los datos mensuales de empleo en Estados Unidos.
Seguiremos informando….