La ministra de Sanidad, Carolina Darias, lleva este martes al Consejo de Ministros la creación de la Agencia Estatal de Salud Pública (AESAP), tal y como adelantó ella misma este lunes. Será, a su vez, el mismo día en el que que elevará la propuesta de eliminar la obligatoriedad de llevar mascarilla en el transporte público. Dos realidades que se cumplen tras los recientes anuncios del Ministerio de Sanidad que ya había avanzado ambas propuestas y su idea de llevarlas en breve a la reunión de Gobierno.
Un anuncio que la ministra ha hecho público este lunes, durante la inauguración de la exposición La vacuna de la viruela. Su difusión en España y América en los Bicentenarios de Edward Jenner e Ignacio M.ª Ruiz de Luzuriaga, en la Real Academia Nacional de Medicina de España. Aunque, fuentes ministeriales consultadas posteriormente han confirmado que para conocer la ubicación de la sede de este organismo público estatal habrá que esperar. A pesar de ser uno de los aspectos que está generando mayor expectación entre comunidades autónomas por los recursos que movilizará y el empleo que generará su creación allá donde se ubique.
Por tanto, lo único que sucederá este martes es que el texto definitivo de esta nueva normativa que rige la AESAP pasará por el filtro del Consejo de Ministros. Esperando a que, en próximas fechas, se elabore y apruebe el reglamento que recogerá la ubicación geográfica y el organigrama al completo del ente.
¿Qué supondrá su aprobación?
El pasado 23 de agosto fue cuando el Consejo de Ministros dio el primer paso para sacar adelante el anteproyecto de ley con el que se creará la agencia, que fue la correspondiente primera lectura. Y, como bien ha remarcado la ministra en diferentes ocasiones se trata de es una iniciativa demandada por los profesionales de la salud y por el conjunto de la ciudadanía, especialmente tras la experiencia de la pandemia. Además, ha recordado que cuenta con un amplio consenso parlamentario, como así se refleja en el Dictamen de la Comisión de Reconstrucción Social y Económica del Congreso de los Diputados.
Pero, ¿cuáles serán sus principales funciones? Pues bien, según han afirmado fuentes gubernamentales y se ha podido conocer a través de su texto definitivo, la futura agencia de salud pública desempeñará funciones en los ámbitos de vigilancia en salud pública, preparación y respuesta frente a futuras emergencias, asesoramiento y evaluación, salud pública internacional e información y comunicación de riesgos para la salud. Y,eEn su función de asesoramiento y evaluación, reforzará la coordinación con las instituciones de Salud Pública, impulsando el trabajo en red y contribuirá al diseño y evaluación de políticas One Health.
Además, el todavía futuro Centro Estatal de Salud Pública tendrá naturaleza de Agencia Estatal y será constituido como una institución de excelencia técnica y científica que tiene como objeto la preparación, prevención, detección y respuesta rápida frente a amenazas y riesgos para la salud de la población como sucedió con la crisis del covid. Es decir, será un ente que, aunque dependa del Ministerio de Sanidad, tendrá personalidad jurídica propia, lo que le da más autonomía en su gestión y permite, por ejemplo, hacer contrataciones de forma más ágil.
Por tanto, con esta condición tendrá la misión de aglutinar los organismos que ya trabajan en salud pública y añadir nuevas funciones y competencias. La nueva agencia, previsiblemente, será un paraguas para todos ellos, ya sea absorbiéndolos o coordinando su trabajo, sirviendo además de eje de comunicación con entidades supranacionales, como pueden ser la Organización Mundial de la Salud o el Centro Europeo de Control de Enfermedades.
Según afirmó en un primer momento Darias, “a agencia permitirá al país “estar mejor preparado en términos de preparación, gestión, análisis y respuesta para amenazas de salud pública” a lo que añadió que, “va a contribuir para mejorar salud y bienestar de los ciudadanos, con la prevención y control de enfermedades, al tiempo que va a promover conocimiento técnico y científico, en un contexto de cambio climático y zoonosis”.
Comunidades candidatas
Ahora bien, entre las cuestiones sin resolver que rodean al futuro organismo se encuentra dónde se establecerá su sede y quién lo dirigirá. Lo único que se sabe al respecto es que son varias la comunidades que optan a albergar la esperada AESAP y que se descarta por completo que sea en Madrid. Las demás, ultiman sus candidaturas y se mantienen a la espera de conocer qué requisitos pedirá Sanidad. La Región de Murcia, Galicia, Aragón, Andalucía, Comunidad Valenciana, Asturias, Castilla-León o Extremadura rivalizan por albergar el organismo.
Una incertidumbre de la que se quejan estas comunidades ya que por ahora, no se conocen ni los estatutos de la agencia, ni las competencias, ni los citados requerimientos. Las únicas condiciones que Sanidad ha dado a conocer para albergar esta agencia son tres: ser una ciudad sana, es decir que promueva hábitos de vida saludable; tener centros de estudios relacionados con la salud pública y que potencie la investigación. Y, por otro lado. entre los nombres que más han sonado para ser su cabeza visible, está el del director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES), Fernando Simón.
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