ChatGPT, ese sistema de chat con inteligencia artificial que está sorprendiéndonos a todos… ¿Qué es exactamente? De momento, sabemos que se trata de uno de los sistemas de IA más innovadores, capaz de responder a “cualquier cosa”, pero ¿Cómo lo hace? ¿Es fiable? ¿Sustituirá a los buscadores? Y, sobre todo, ¿nos “aislará” aun más?
Para encontrar respuestas sobre el ChatGPT, desde PRNoticias hemos conversado con David Hurtado, Customer Success Innovation Lead en Microsoft y Profesor de The Valley. Especialista en nuevas tecnologías, aterrizó en Microsoft hace ya más de 21 años, donde ha ocupado diferentes roles y, desde hace 3 años, es Customer Success Innovation Lead, un rol que le permite liderar la innovación del departamento y aplicar nuevas tecnologías como IA o cloud computing. Una voz cualificada para hablar del ChatGPT, sin discusión:
¿Qué es ChatGPT?
Es una de las últimas iteraciones en una serie de herramientas alrededor de la IA generativa. Es una aplicación capaz de mantener conversaciones con las personas, en forma de chat. Es sorprendente porque maneja muy bien el lenguaje. Además de simplemente hablar, es capaz de explicar, argumentar, detallar, responder preguntas, traducir o incluso cambiar de estilo en función de lo que se le pida.
¿Qué tecnología usa?
ChatGPT está basado en un modelo grande de lenguaje (LLM – Large Language Model) llamado GPT-3.5. En este sentido, aunque ChatGPT es la herramienta que se ha hecho muy popular, el verdadero cerebro es el modelo GPT-3.5.
¿Está al alcance de todos o, por el momento, de unos pocos?
Tanto ChatGPT como el modelo GPT-3.5 se han puesto de forma pública y gratuita para que cualquiera pueda probarlo y utilizarlo. Tanto la herramienta como el modelo se ofrecen también como servicio de pago para que pueda ser integrado en aplicaciones y procesos de negocio de forma sencilla. Cualquiera puede usarlo, descubrir el potencial, e integrarlo en sus herramientas. De hecho, ya estamos viendo gran cantidad de aplicaciones de mercado y proyectos en empresas y personales utilizando las versiones de pago.
¿Qué uso le pueden dar las empresas e instituciones?
Las empresas pueden crear todo tipo de soluciones alrededor del procesado de información. Por ejemplo, ofrecer un asistente a los empleados o clientes que procesen manuales de procedimientos operativos y los convertir en una conversación, con explicaciones, en otros idiomas, etc. Los casos de uso son cuasi-infinitos.
¿Y los usuarios?
Desde el punto de vista más personal, uno de los mejores casos de uso es la posibilidad de que ChatGPT te explique conceptos. Puede explicar y argumentar hasta que los conceptos queden aprendidos. Como herramienta de aprendizaje es tremenda. Además, conectado a Internet, como en la integración que se ofrece con el buscador Bing, puede unirlo todo con datos reales y búsquedas en Internet.
¿Podemos fiarnos completamente de las respuestas que obtenemos?
Esta es una confusión común. Como modelo de lenguaje, GPT-3.5 y ChatGPT manejan muy bien el lenguaje, pero no tienen datos, no hay factualidad real. Si le preguntamos por hechos concretos, tratará de responder, y es muy posible que se equivoque. Para poder fiarnos de las respuestas factuales, hay que conectarlo a una fuente de datos, como Internet (buscador Bing) o en una empresa, conectado con las fuentes de documentación internas.
¿Estamos ante una nueva forma de “no comunicarnos” entre los seres humanos?
Más bien diría que estamos en una nueva forma de comunicarnos con las máquinas, mucho más natural y “humana”. Si esto crea problemas de sociabilidad entre humanos, ya depende de nosotros. Igual que, por ejemplo, los teléfonos móviles nos acercan a los seres queridos lejanos, pero también nos aíslan si pasamos demasiado tiempo mirando la pantalla. Depende totalmente de nosotros.
¿Dónde está el límite como humanos en la interacción con esta herramienta?
En el propio lenguaje. La herramienta ha aprendido a partir de nosotros mismos (contenido de Internet), y por eso se le da tan bien manejar el lenguaje. El límite parece estar en lo buenos que seamos manejando las palabras.
¿Y el límite como herramienta tecnológica? ¿Podría desplazar a los buscadores?
Totalmente. La idea básica del buscador, que no ha evolucionado en 20 años, es que en base a palabras clave, recibo enlaces a las fuentes, y soy yo el que tiene que ir a las fuentes y leer el contenido. Con esta nueva herramienta, desaparece esa necesidad. Yo le hago la pregunta a Bing Chat (la versión de ChatGPT conectado con el buscador Bing), y ella se encarga de buscar los datos y ofrecerme una explicación. A partir de ahí puedo mantener una conversación con Bing Chat sobre el tema. Es decir, tengo un asistente 24×7 que hace las búsquedas por mí y me lo explica. 20 años hemos tardado 🙂
Seguiremos Comunicando…