La guerra en Ucrania ha sacudido las vidas de millones de ucranianos como consecuencia de numerosos bombardeos, reclutamiento masivo, muertes, dilemas de exilio… Sin embargo, en tan solo un año Europa parece haber olvidado una realidad que nos continúa afectando a todos. Como sucede en la mayoría de ocasiones, una vez desaparece el miedo y el conflicto no nos toca en primera persona, es momento de decir adión al problema.
En cuanto al número de heridos o fallecidos en el más de año de guerra que lleva Ucrania nunca vamos a saber las cifras reales, pero aproximadamente los últimos datos que se conocen es que el conflicto habría dejado en torno al mes de enero unos 280.000 soldados muertos o heridos y 30.000 civiles fallecidos . Pero, ¿por qué los medios especializados en salud no nos cuentan esta realidad? ¿Por qué no nos cuentan en qué está ayudando España y que pasa con los heridos y los ciudadanos ucranianos que llegan a nuestro país?
La desinformación solo nos aleja de la realidad, del centro de una actualidad que nos concierne a todos sino que nos impide actuar al respecto y en consecuencia con el contexto que nos rodea. Es cierto que hoy en día, gracias a la Internet, prácticamente no tenemos excusa para no estar empapados del acontecer local, regional, mundial o universal. Sin embargo, todos somos conscientes de que los periodistas, a través de quienes nos llega la información diaria más relevante, con su agenda mediática, aunque no deciden lo que tiene que pensar u opinar el público, sí tienen en sus manos decidir sobre qué temas hay que opinar.
Pues bien, en un primer momento, Ucrania ocupó todos los espacios informativos y se informaba de cada ataque, enfrentamiento y bombardeo que ocurría en el país. Pero ahora es distinto, e l conflicto bélico sigue existiendo, a España todos los días llegan heridos de guerra pero la cobertura mediática ha cambiado, el interés del público ha caído y el conflicto ha evolucionado y, ¿el motivo? El tiempo.
Con el paso del tiempo, la información va perdiendo interés, surgen nuevas noticias que acaparan el espacio y la novedad se impone. El tiempo es fundamental. La noticia pasa de abrir la información a convertirse en una columna en página impar o a directamente no aparecer como está sucediendo con la guerra en los medios especializados de salud.
No obstante, ¿sigue interesando la guerra en Ucrania? Puede que el público general, gracias a los medios, haya dejado de lado la información sobre la guerra, pero la realidad es que sigue siendo un tema que interesa a Occidente, principalmente por las consecuencias.Es necesario seguir informando durante los meses que vienen porque las consecuencias pueden ser incluso peores. Y es que, en estos momentos, los ciudadanos occidentales ya están notando la interrupción de las exportaciones, el aumento de los precios del gas y el petróleo, y el impacto sobre la ayuda humanitaria.
Los militares ucranianos heridos reciben tratamiento en el Hospital Gómez Ulla
El 14 de enero se realizó el primer traslado a España de un nuvo grupo de militares heridos ucranianos al Hospital Gómez Ulla donde recibirían su correspondiente tratamiento. Una intervención médica proporcionada por España a los combatientes que ha ido en todo momento acompañada de apoyo psicológico y psiquiátrico, rehabilitación y fisioterapia, así como apoyo en las gestiones necesarias para su inclusión en el sistema de protección temporal y el sistema sanitario español.
Los datos más recienten muestran como el número de soldados heridos en la guerra atendidos en España asciende hasta 57. Y, hasta el momento, los militares han sido tratados en dos hospitales militares; el Hospital General de la Defensa de Zaragoza (en colaboración con el Hospital Miguel Servet de esa ciudad) y el Hospital Central de la Defensa Gómez Ulla de Madrid. Una ayuda, que aunque no ha sido practicamente difundida por los medios ha permitido al Ministerio de Defensa reafirmar el compromiso de proporcionar asistencia continuada a Ucrania, dentro de sus capacidades, mediante el tratamiento en España de sus heridos de guerra, o así lo comunicó a inicios de este año a través de un comunicado.
Además, la efectividad del trabajo realizado por los médicos españoles se está comprobando día a día. Ya son 30 los militares que tras curarse han regresado a su país, un camino y un proceso en el que España sigue tendiéndoles la mano. Una vez que los militares atendidos reciben el alta y regresan a su país, los médicos del hospital mantienen el contacto con aquellos que continúan su tratamiento a través de la Asociación de Ucranianos Residentes en España (AURA), mediante remisión de informes y apoyo médico.
Y es que, como debe ser en un conflicto de estas medidas, el apoyo sanitario forma parte del compromiso bilateral de España con Ucrania, que se completa con la ayuda humanitaria, apoyo logístico y material y en el área de adiestramiento. . Actualmente, según el último comunicado del Ministerio, se mantienen cuatro heridos ingresados en el Gómez Ulla y 23 en el Hospital General de la Defensa de Zaragoza.
La sanidad privada, no se queda atrás, y a pesar de la falta de colaboración que sigue existiendo en el SNS, sigue intentando ofrecer toda la ayuda posible a los más perjudicados por el conflicto. Actualmente los grupos hospitalarios privados con mayor presencia en este país continúan manteniendo reuniones con el objetivo de apoyar aun más, la ayuda humanitaria ya sea desde los hospitales, las distribuidoras, las farmacias o incluso, los laboratorios.
Un año de apoyo de España a Ucrania
En definitiva, los profesionales de la información no están interesados en contar que está pasando, pero la ayuda humanitaria existe. Cuando la guerra estalló hace un año, el Gobierno de España se movilizó lo más rápido que pudo para ayudar a Ucrania y hasta día de hoy, se puede confirmar que España como país se ha volcado. Se han realizado 17 vuelos con más de 600 personas vulnerables para recibir tratamientos, fundamentalmente oncológicos, en España.
También se han traído, como bien se ha mencionado, a 57 militares heridos que han sido tratados en el Hospital Militar de Zaragoza y en el Gómez Ulla. Y, a eso hay que sumar los 175.000 ucranianos que están en España refugiados, cuyas llegadas se coordinan desde el Ministerio de Asuntos Exteriores, así como los 300 millones donados al Fondo Europeo para la Paz, lo que supone casi el 10% del total que tiene el fondo.
Así que, los medios no parece que nos lo vayan a contar pero España debe seguir tendiendo la mano a Zelensky en un conflicto que, por desgracia, sigue latente. Tras un año del inicio de la guerra, Sánchez visitó por segunda vez Kiev para renovar su compromiso con este país y continuar firme en su apoyo a los ciudadanos ucranianos pese a la negativa de su socio de Gobierno.
Seguiremos informando…
