La temporada radiofónica encara su recta final. Es hora de hacer balance y aunque en la Cadena SER, afrontan este último empujón con un mejor pronóstico que en otras temporadas, también hay algunas sombras que preocupan en los despachos de Gran Vía 32.
El último EGM dejó a la emisora de Prisa como la más escuchada de nuestro país con 4.143.000 oyentes. A pesar de saber mantener la estabilidad de sus fieles, algunos de sus programas han dejado atisbos de desgaste, o directamente han confirmado los malos datos que han arrastrado en los últimos tiempos.
Uno de ellos ha sido El Larguero. El programa que dirige Manu Carreño sigue la estela del declive de la radio deportiva y vuelve a perder oyentes -casi 100.00- siendo uno de los puntos más débiles de la emisora.
Tampoco le han ido bien las cosas a Hora 25, que a pesar de superar el millón de oyentes ha dejado de ser el referente de su franja por primera vez en 25 años. Ni las noches informativas, ni las deportivas, ni la franja de madrugada. El Faro de la SER tampoco ha brillado en el último balance de oyentes. El espacio de Mara Torres ha perdido al 10% de su audiencia y se conforma con 166.000 oyentes, aunque sigue liderando su franja de emisión.
Los dos programas más escuchados de los fines de semana tampoco se encuentran en su mejor momento. Mientras que Carrusel Deportivo ha perdido oyentes en las dos tardes del fin de semana, A vivir, su gran carta para las mañanas ha superado el primer EGM de 2023 con un balance general positivo, aunque ha perdido 60.000 fieles en la mañana del domingo.
Fortalezas
Mientras tanto, la emisora de Prisa sigue contando con apuestas seguras como es el caso de La Ventana. Los de Carles Francino se han convertido en una apuesta segura y estable, que sabe mantener las distancias con JELO y COPE.
Pero la gran victoria de la Cadena SER han sido los buenos números de Hoy por hoy. Ángels Barceló y su equipo han sabido resistir en horas bajas y han mantenido a raya a Carlos Herrera y han cerrado filas manteniendo intacto el liderazgo de las mañanas rozando los tres millones de oyentes.
Con estas cifras y, a pesar de haber atravesado uno de sus momentos de mayor declive, la Cadena SER ha superado a su máximo rival y ha puesto tierra de por medio con COPE, frustrando sus grandes objetivos y tirando un jarro de agua fría a sus ansias de liderazgo.
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