David Leo, más conocido como El Estudiante de El Cazador, ha sido procesado por un presunto delito de violencia de género. Poco tiempo después de que se publicara la noticia, RTVE ha transmitido a los medios que, tras conversar con David Leo, “este ha transmitido su intención de apartarse del programa para no afectar ni a su persona ni al proceso judicial en el que está inmerso”.
Asimismo, la corporación señala que respeta su presunción de inocencia. Por otro lado, aclara que la grabación de esta temporada ha finalizado. No obstante, no descartan paralizar la emisión de los capítulos de El Cazador que aún están por emitir.
Según informa Público, la pareja del colaborador del programa de TVE viajó desde Málaga a Valencia a finales de febrero para acudir con él a un evento de poesía. Según el escrito de acusación del Ministerio Público, aportado al Juzgado de lo penal 12 de Málaga, David Leo le lanzó a su pareja “una toalla empapada en agua” en la habitación “con el ánimo de atentar contra su integridad moral”.
Seguidamente después le dijo: “Cállate, puta; déjame dormir, deja de hablar con tu madre; no voy con una cucaracha; puta, me privas de sueño, torturadora del sueño”. Días más tarde, el 28 de febrero, la pareja de Leo se trasladó a un hotel de Santiago de Compostela. Allí, “con ánimo de atentar contra la integridad física”, él le lanzó un cigarrillo a la cara, forcejeó con ella e incluso le propinó una patada, según el escrito.
Tras esto, la mujer decidió regresar a Málaga y se personó en un centro de salud. Según el medio citado anteriormente, el facultativo que la atendió abrió de oficio un protocolo por violencia de género para el juzgado y le aconsejaran que interpusiera una denuncia.
La Fiscalía pide un año de prisión para David Leo
La vista oral ha quedado fijada para principios de abril de 2024. La Fiscalía pide un año de prisión por un presunto delito de lesiones a su expareja en el ámbito de la violencia machista y la prohibición de comunicarse con la víctima y acercarse a ella a menos de 800 metros durante tres años.
Por otro lado, le imputa otro presunto delito de injurias y vejaciones de carácter leve en el ámbito de la violencia de género. Para ello, solicita cuatro meses de multa con cuota de 18 euros diarios y una indemnización de 400 euros.
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