Los resultados de la II ola del EGM se traducen en una nueva caída generalizada entre las principales emisoras. COPE se va de vacío al cierre de esta temporada tras registrar un nuevo descenso. Pierde así la oportunidad de superar a la SER y lograr un sorpasso que se le vuelve a resistir. La emisora de Ábside Media cae un 5% y pierde 177.000 oyentes entre abril y junio, conformándose con un total de 3.380.000
Por su parte, la emisora del Grupo Prisa tampoco levanta cabeza, que registra su peor dato de los últimos años. La SER (-2,1%) pierde 87.000 oyentes respecto a la ola anterior. Con 4.056.000 fieles, se mantiene líder gracias en gran medida a la falta de empuje de su rival.
A Onda Cero tampoco le ha ido bien. La emisora de Atresmedia pierde 175.000 oyentes respecto al mes de abril. Cierra la temporada sin poder repetir los buenos resultados que cosechó en la última ola, cuando creció un 8%. Sin embargo, se aleja de los dos millones de oyentes y se conforma con 1.822.000 adeptos.
RNE, a un paso de perder la referencia del millón de oyentes
La caída generaliza se completa con RNE, que también se contagia de esta ola negativa. Después del respiro de abril, la emisora pública pierde 13.000 oyentes, situándose en 1.022.000. Pese a mantenerse por encima del millón de oyentes, cierra la temporada muy lejos del resto de emisoras generalistas.
Tampoco esRadio se libra de la espantada de oyentes, pues pierde 46.000 fieles. La emisora de Libertad Digital cae un 6,6%, siendo la radio que más volumen de oyentes pierde respecto al mes de abril. Se queda así con un total de 656.000 oyentes. En cuanto a las emisoras catalanas, RAC 1 mejora sus datos de abril, alcanzado los 894.000 oyentes. Catalunya Radio hace lo propio y reúne diariamente a un total de 614.000 fieles.
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