La caída generalizada de oyentes en la radio española que dibujó el último Estudio General de Medios ha convertido los bajos resultados de la Cadena SER en una hecatombe moderada. Algo así como mal de muchos…Y es que la emisora de Prisa ha despedido la temporada con una caída generalizada de oyentes como emisora y en sus principales programas, salvando La ventana de Carles Francino.
Sin embargo, siguen siendo la emisora más escuchada con más de cuatro millones de oyentes -la única que supera esa barrera- y además lidera en las principales franjas. De lunes a viernes, hace pleno en cuanto a liderazgo, siendo la emisora más escuchada durante las mañanas, las tardes, las noches informativas y las noches deportivas.
La radio de Prisa ha cerrado una temporada convulsa y llena de altibajos que se han saldado con la pérdida de 84.000 oyentes -COPE, 200.000- y que deja en la Cadena SER una lista de tareas pendientes si no quiere seguir ahondando en esta racha negativa.
Afincada en la inestabilidad
Mantener el liderazgo de Hoy por hoy, a pesar de perder 110.000 oyentes respecto a la oleada anterior ha terminado por ser un gran éxito. Pero lo cierto es que, Ángels Barceló y su equipo no se pueden confiar si no quieren seguir los pasos de Hora 25, que en esta última temporada ha perdido, de forma momentánea, un liderazgo que había mantenido 25 años intacto.
Tampoco se puede decir que El Larguero haya vivido su mejor temporada. La radio deportiva ha vivido uno de sus años más flojos a pesar de lo abultado de la agenda de eventos deportivos. No obstante, el equipo que líder Manu Carreño ha sabido mantener el liderazgo, cediendo menos terreno que sus rivales.
Salvo sorpresas, la Cadena Ser apostará por una estrategia de continuidad de cara a la próxima temporada, manteniendo a todos sus barones. Una apuesta arriesgada después de los números con los que se ha despedido en junio, pero que le ha valido para volver a despedirse como líder una temporada más.
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